Causas que llevaron a la Proclamación de la Segunda República
La decadencia y la soledad política del régimen de Primo de Rivera era evidente. No solo se manifestó el descontento de los partidos políticos, sino también el de los militares, y a eso se le sumó la coyuntura económica de 1929. Por lo que, tras la falta de apoyos, incluido el del rey, Primo de Rivera dimite y se exilia. El rey establece un nuevo sistema parlamentario, pero ninguno de los gobiernos fue capaz de conseguirlo. Durante el gobierno Berenguer se firma el Pacto de San Sebastián, donde se decidió la creación de un comité revolucionario presidido por el republicano y antiguo monárquico Niceto Alcalá-Zamora, cuyo objetivo era organizar una huelga general y una revuelta armada contra la monarquía. Ambas iniciativas fracasaron. Pero la República termina llegando mediante elecciones municipales el 12 de abril de 1931, por lo que el rey termina abdicando y se proclama la Segunda República.
Europa vive en esos años una muy difícil coyuntura económica debido a la crisis económica internacional de los años treinta. Las principales consecuencias en España fueron:
- La reducción del comercio exterior, que afectó en especial al sector agrícola. Las exportaciones disminuyen.
- Reducción de las inversiones extranjeras.
- Cierre de fábricas y empresas, aumentando así el desempleo.
Es decir, las dificultades internas se pueden resumir en paro agrícola, reparto desigual de la tierra y políticas sociales insuficientes.
Establecimiento de la República y Primeras Etapas
14 de abril de 1931: Victoria republicana en las elecciones municipales → exilio de Alfonso XIII → proclamación de la Segunda República. Se forma un Gobierno provisional presidido por Alcalá Zamora e integrado por republicanos, socialistas y nacionalistas.
Se aprueba la Constitución de 1931:
- Define España como una «República de trabajadores de toda clase».
- Establece un Estado no confesional (laico).
- Reconoce el derecho a la autonomía de las regiones.
- Esto generó el rechazo de sectores conservadores.
El Bienio Reformista (1931–1933)
Durante este periodo, bajo el gobierno de Manuel Azaña, se impulsaron importantes reformas:
- Reformas laborales.
- Reforma militar.
- Reformas educativas.
- Reforma agraria.
Estas reformas contaron con el apoyo inicial de obreros y campesinos, pero la lentitud y las dificultades en su aplicación generaron frustración, lo que llevó a un auge de organizaciones como la CNT y el PCE.
Oposición a las Reformas
- Iglesia Católica: Se opuso a la libertad religiosa, el fin de la financiación estatal y la pérdida de poder educativo.
- Sectores del Ejército: Descontentos con la reforma que buscaba modernizarlo y reducir el número de oficiales.
- Oligarquía terrateniente y financiera: Veían amenazados sus privilegios con la reforma agraria y electoral.
Partidos Políticos
- A favor de la República (inicialmente):
- Partido Republicano Radical (Lerroux)
- Acción Republicana (Azaña)
- Partido Socialista Obrero Español (PSOE)
- Partido Radical Socialista
- Derecha Liberal Republicana (Alcalá Zamora, inicialmente Progresista): católico.
- Partido Republicano Conservador (Miguel Maura): católico.
- Partidos nacionalistas (catalanes y gallegos).
- La izquierda moderada y los partidos obreros.
Las Reformas Republicanas en Detalle
- Educación: Creación de más escuelas y plazas para maestros. Misiones Pedagógicas.
- Estado laico: Disolución de la Compañía de Jesús (jesuitas), fin de la financiación pública de la Iglesia, introducción del divorcio, eliminación de la enseñanza religiosa obligatoria.
- Ejército: Se exigió juramento de fidelidad a la República. Se ofreció el retiro voluntario con sueldo íntegro a oficiales no afines. Creación de la Guardia de Asalto como nuevo cuerpo de orden público.
- Autonomía:
- Cataluña: Aprobación del Estatuto de Autonomía en 1932 → restablecimiento de la Generalitat.
- País Vasco: Aprobación del Estatuto de Autonomía en 1936 (ya iniciada la Guerra Civil).
- Galicia: Estatuto aprobado en plebiscito en 1936, pero no llegó a aplicarse por la guerra.
- Reforma Laboral: Impulsada por Largo Caballero (UGT). Se estableció la jornada laboral reducida (8 horas), aumento de salarios, derecho a huelga, regulación del empleo (Ley de Contratos de Trabajo, Jurados Mixtos).
- Reforma Agraria: Ley de Reforma Agraria (1932). Contemplaba la expropiación (con indemnización) de latifundios mal cultivados o no explotados directamente por sus dueños. Reparto de tierras a campesinos y jornaleros a través del IRA (Instituto de Reforma Agraria). Su aplicación fue lenta y compleja.
El Frente Popular
Causas de su Formación
El Frente Popular surge como reacción tras:
- El fracaso electoral de la izquierda en 1933 y el gobierno de centro-derecha (Bienio Radical-Cedista).
- La dura represión de la Revolución de Asturias de 1934.
- El auge del fascismo en Europa.
Se unieron partidos como el PSOE, PCE, Izquierda Republicana (fusión del partido de Azaña y otros), Unión Republicana, POUM, Partido Sindicalista, y contó con el apoyo externo de la UGT y Esquerra Republicana de Catalunya. La CNT, aunque no se unió formalmente, no pidió la abstención como en 1933.
La derecha se agrupó en torno a la CEDA y el Bloque Nacional (liderado por Calvo Sotelo), pero sin un programa común claro.
En las elecciones de febrero de 1936 ganó el Frente Popular, obteniendo la mayoría de escaños gracias al sistema electoral, pese a que el número total de votos estuvo muy igualado con el bloque de derechas. Gobiernan los partidos republicanos (Izquierda Republicana y Unión Republicana) con apoyo parlamentario de socialistas y comunistas.
Medidas Iniciales del Gobierno del Frente Popular
- Amnistía general para los presos políticos de la Revolución de 1934.
- Restablecimiento del Estatuto de Autonomía de Cataluña.
- Aceleración de la tramitación de los estatutos de autonomía para Galicia y País Vasco.
- Reactivación de la reforma agraria.
- Continuación de las reformas educativas y la separación Iglesia-Estado.
Contexto Político y Oposición (Repetición de sección anterior con ligeras variaciones)
Victoria republicana en elecciones → exilio de Alfonso XIII → proclamación de la Segunda República. Gobierno provisional: Alcalá Zamora + republicanos, socialistas, nacionalistas.
Constitución 1931: Estado no confesional, autonomías → rechazo de sectores conservadores.
Bienio reformista (1931–1933): Reformas laborales, militares, educativas, agrarias. Apoyo inicial de obreros y campesinos → luego frustración → auge de la CNT y PCE.
Oposición:
- Iglesia: libertad religiosa, fin financiación, pérdida poder educativo.
- Ejército: reforma y reducción de oficiales.
- Oligarquía: amenaza a privilegios con reforma agraria y electoral.
Partidos a favor (inicialmente o con matices): Partido Republicano Radical, Partido Progresista (Alcalá Zamora): católico, Partido Conservador (Miguel Maura): católico, Partido Liberal Demócrata, la izquierda moderada y los partidos obreros.
Partidos en contra (o que evolucionaron a la oposición frontal): Falange Española, CEDA (Confederación Española de Derechas Autónomas), Comunión Tradicionalista (carlistas).
Evolución Política y División
Tras el triunfo del Frente Popular y el inicio de la Guerra Civil en julio de 1936, España se divide en dos zonas:
Zona Republicana
Se caracterizó por una inicial falta de unidad interna y un proceso revolucionario espontáneo en muchos lugares. Organizaciones obreras como la CNT/FAI y la UGT tomaron el control de industrias y tierras (colectivizaciones), formando Juntas y Comités locales que actuaban con gran autonomía. El gobierno intentó armar a las milicias obreras para defender la República, pero con dificultades para centralizar el esfuerzo bélico.
El gobierno de Largo Caballero (septiembre 1936 – mayo 1937) trató de unificar el mando militar y político, pero fracasó en parte por la profunda división ideológica y estratégica, especialmente entre anarquistas y comunistas (apoyados por la URSS), lo que llevó a su dimisión tras los ‘Hechos de Mayo’ de 1937 en Barcelona.
Zona Sublevada
En la España en poder de los sublevados se impuso una Dictadura Militar desde el principio. Inicialmente, no existía un programa político alternativo claro más allá del derrocamiento de la República y la imposición del orden.
Se creó una Junta de Defensa Nacional (julio 1936), con sede en Burgos, que asumió todos los poderes del Estado. Sus primeras medidas fueron:
- Supresión de los partidos políticos y sindicatos (excepto los afines al Movimiento).
- Derogación de la Constitución de 1931 y de las reformas republicanas.
- Instauración de una represión brutal y sistemática contra los considerados enemigos.
- Establecimiento de una férrea censura de prensa.
Franco al poder: En octubre de 1936, Francisco Franco fue nombrado Jefe del Gobierno del Estado y Generalísimo de los Ejércitos, concentrando progresivamente todo el poder político y militar.
Los Costes Humanos
Los tres años de guerra civil que siguieron al fracaso parcial del golpe de Estado supusieron grandes pérdidas humanas y destrucción material. Podemos destacar:
- La represión en la zona republicana: Afectó principalmente a militares sublevados, miembros del clero, políticos de derechas y personas consideradas afines al alzamiento. Se produjeron asesinatos políticos y ejecuciones sumarias, especialmente en los primeros meses (‘paseos’, sacas de cárceles), a menudo fuera del control del gobierno central.
- La represión en la zona sublevada: Fue más sistemática, planificada desde el poder y prolongada en el tiempo. Se caracterizó por matanzas de civiles en masa tras la ocupación de pueblos y ciudades, y la ejecución de figuras republicanas, sindicalistas, intelectuales y cualquier sospechoso de oposición. Esta represión continuó institucionalizada durante la dictadura franquista.
Económicamente, el país quedó arruinado tras la destrucción de infraestructuras (puentes, vías férreas, edificios), la pérdida de recursos agrícolas e industriales, y la desaparición de las reservas de oro del Banco de España (trasladadas a Moscú).
Socialmente, la guerra profundizó la polarización extrema entre vencedores y vencidos. La posguerra se caracterizó por una represión institucionalizada contra los derrotados, con encarcelamientos masivos, campos de concentración, trabajos forzados, depuraciones profesionales y confiscaciones de bienes.