La Dictadura de Primo de Rivera en España (1923-1930): Contexto, Políticas y Fin

Introducción

Tras los sucesos de 1917, España entró en una etapa revolucionaria durante la cual terminó el sistema político canovista, desbordado por todas partes al no saber controlar la situación. Entre 1917 y 1923 hubo años de un gran malestar social que se manifestaron en huelgas. Además, dos nuevos hechos empeoraron aún más la situación: el 8 de marzo de 1921, el jefe del gobierno, Eduardo Dato, fue asesinado por un grupo de anarquistas y en julio de ese mismo año se produjo el Desastre de Annual en la guerra de Marruecos, que se saldó con la pérdida de numerosas vidas humanas.

La Dictadura de Primo de Rivera: Periodos y Características

El 13 de septiembre de 1923, Miguel Primo de Rivera declaró el estado de guerra y exigió que el poder pasara a los militares. Alfonso XIII aceptó. Primo de Rivera formó un gobierno integrado solo por militares. La dictadura duró siete años, divididos en dos periodos:

  1. El Directorio Militar (1923-1925): Se presentó como una solución provisional a los problemas pendientes.
  2. El Directorio Civil (1925-1930): Trató de institucionalizar el régimen y llevó a cabo una política de reformas sociales y económicas.

Causas del Golpe de Estado de 1923

El golpe de Estado se presentó como una salida al bloqueo que sufría el régimen constitucional y para evitar el peligro de revolución social. Primo de Rivera anunció su voluntad de acabar con los caciques, con el blindaje político y con las amenazas a la unidad nacional. Pero lo que más peso tuvo fue que las Cortes exigieran responsabilidades por el Desastre de Annual.

Reorganización del Estado y Medidas del Directorio Militar

Las primeras medidas del Directorio Militar dejaron claro su carácter dictatorial: disolución de las Cortes, cese de las autoridades civiles, etc. El orden público fue encargado al ejército y se inició una fuerte represión contra los sectores más radicales del movimiento obrero.

Los alcaldes y concejales fueron sustituidos por juntas compuestas por los mayores contribuyentes de cada localidad. Prohibida la actuación de todos los partidos, se creó uno nuevo, la Unión Patriótica, con el objeto de servir de sostén al nuevo régimen y proporcionar los cargos para la administración. El problema de Marruecos ocupó un lugar central en las preocupaciones del dictador. Se inició una política conjunta con Francia que dio lugar al Desembarco de Alhucemas (1925), operación militar de gran éxito. A partir de 1927, las tropas españolas dieron por concluida la ocupación efectiva de todo el Protectorado. En 1927, Primo de Rivera creó una Asamblea Nacional Consultiva.

Política Económica y Social durante la Dictadura

La Dictadura se benefició una vez superados los problemas generados por la Gran Guerra. Se realizó una política dirigida al desarrollo de la industria nacional y de las obras públicas:

  • Construcción de ferrocarriles, carreteras, etc.
  • Se construyeron en varias ciudades barriadas populares para superar el enorme déficit de viviendas dignas que existía.
  • Se aprobó un Decreto de Protección de la Industria Nacional.
  • Se concedieron grandes monopolios, como Telefónica.
  • Se concedió la exclusiva del petróleo a CEPSA.

Por otra parte, la dictadura puso en marcha un modelo que tomó forma en la Organización Corporativa Nacional. Su misión era establecer los salarios y las condiciones de trabajo y mediar en los conflictos que pudieran surgir. La UGT aceptó el plan y colaboró. La CNT, que no lo aceptó, fue prohibida.

La Oposición a la Dictadura de Primo de Rivera

La oposición a Primo de Rivera estuvo integrada por los partidos del turno, republicanos, anarquistas, comunistas y la mayor parte de los intelectuales.

  • Los partidos del turno se sintieron molestos por la excesiva duración del régimen militar.
  • Los republicanos se agruparon en la Alianza Republicana, que se dedicó a promover una intensa campaña propagandística en el exterior.
  • Desde 1929, el PSOE estaba a favor de instaurar una República.
  • La CNT mostró una oposición radical.
  • El movimiento intelectual estuvo protagonizado por figuras como Unamuno, Ortega y Gasset, Blasco Ibáñez, etc. Los estudiantes, agrupados en la Federación Universitaria Española, participaron con huelgas y manifestaciones.

Con respecto a Cataluña, la política de la dictadura fue de represión de sus señas de identidad: prohibición de la sardana, clausura del campo del FC Barcelona. Lo que provocó un malestar notable en amplias capas de la población. La acción más importante fue el intento de invasión del territorio español desde Francia dirigido por Francesc Macià.

La Caída de la Dictadura y el Camino hacia la II República

Al principio fue bien acogida, pero con el paso de los años comenzó a perder apoyos y a enfrentar una fuerte oposición. En 1930, Alfonso XIII, temeroso de que la dictadura afectase a la monarquía, retiró su confianza al dictador, que dimitió en enero de ese año. Lo sustituyó el general Berenguer, con el objetivo de iniciar una vuelta al sistema constitucional. Con el objetivo de acelerar el fin del régimen dictatorial, republicanos, catalanistas de izquierda y el PSOE firmaron el Pacto de San Sebastián.

En febrero de 1931, Berenguer fue sustituido por el almirante Aznar, que asumió el compromiso de convocar primero elecciones municipales y luego a las Cortes Constituyentes.

Las elecciones municipales, convocadas para el 12 de abril, se iban a convertir en un plebiscito a favor o en contra de la monarquía. Dos días después se proclamó la II República.

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