La segunda republica

LA PRIMERA GUERRA MUNDIAL
En agosto de 1914 estalló en Europa la «Gran Guerra’. Combatieron dos grupos de países: el bloque de los imperios centrales, constituido por Alemania, Austria- Hungría, Bulgaria y el imperio otomano; y el bloque aliado, formado básicamente por Francia, Gran Bretaña, Rusia y los Estados Unidos.
LOS ORÍGENES
Causa: atentado de Sarajevo*,Los estados europeos habían formado complejos sistemas de alianzas militares, como la Triple Entente* y la Triple Alianza*. Entre 1890 y 1914, las grandes potencias habían incrementado su presupuesto militar en una carrera armamentista conocida como la “paz armada”. Los conflictos políticos eran motivo de preocupación. Las rivalidades económicas se acrecentaron.
EL DESARROLLO DEL CONFLICTO (1914-1918)
Comenzó en dos frentes, el Occidental y el Oriental. La primitiva guerra de movimientos se transformó, en una guerra de posiciones(1915).En esta, los soldados de uno y otro bando se «enterraron» sobre el terreno para poder resistir,con lo que los frentes se convirtieron en inmensas líneas de trincheras protegidas por ametralladoras y alambradas.
En los países implicados, la lucha se planteó ahora como una guerra total. La entrada de nuevos países en la contienda la convirtió en un conflicto mundial.
LA PÉRDIDA DE LA HEGEMONÍA EUROPEA
de la guerra fue desolador desde los puntos de vista demográfico y social.
Europa perdió más de nueve millones de habitantes. No menos afectadas quedaron las economías consecuencia de las destrucciones y de los gastos ocasionados por la guerra. Durante el conflicto se produjeron también importantes cambios sociales: incorporación masiva de las mujeres al mundo laboral, etc.
Europa perdió su lugar hegemónico en el mundo, y fue sustituida por los Estados Unidos.
LA PAZ DE PARÍS. EL NUEVO MAPA EUROPEO
LA REGULACIÓN DE LA PAZ
Los intereses de los vencedores de la Gran Guerra dieron lugar a que los temas a tratar en la Conferencia de paz de París, fueran muy amplios y de solución compleja. La base de los acuerdos fueron los «Catorce puntos» enunciados por el presidente norteamericano Woodrow Wilson.
Los cinco tratados fueron una paz impuesta. Wilson consiguió que la Conferencia de París elaborase los estatutos de la Sociedad de Naciones. Su principal éxito fue el Pacto de Locarno*, firmado entre Alemania y Francia en 1925.
EL NUEVO MAPA DE EUROPA
Al finalizar la Conferencia de París los países vencedores firmaron cinco tratados con los países derrotados: los de Versalles, Saint-Germain, Neully , Sévres y Trianon.
El hecho más importante que se recogió en ellos fue el de la configuración de un nuevo mapa político para Europa. Otras cláusulas de los tratados recogían la reducción de los efectivos del ejército alemán y establecían las reparaciones económicas por los daños provocados por la guerra.
LA FRÁGIL POSGUERRA
El pacifismo y el antimilitarismo progresaron entre los intelectuales y amplias capas de la población. El revanchismo se consideró injustamente tratado. El pesimismo general se incrementó debido a la crisis económica. A partir de 1924, y hasta 1929, se inició
una breve época de prosperidad conocida como los “felices años veinte”.
LA REVOLUCIÓN RUSA
DE 1917 Y LA URSS

LA CRISIS DEL IMPERIO ZARISTA
Rusia se hallaba gobernada por los zares de la dinastía Romanov mediante un sistema autocrático.
Las peticiones de la burguesía para dotarse de un Parlamento, y de la clase obrera para conseguir mejoras en sus condiciones de vida, fueron desoídas por el zar Nicolás II y contestadas mediante una brutal represión. El descontento se incrementó tras la derrota en la guerra ruso-japonesa.
LA REVOLUCIÓN DE OCTUBRE DE 1917
La autocracia zarista se vino abajo en febrero de 1917, merced a una revolución burguesa.
En octubre triunfó la revolución bolchevique, que instaló en el poder a un gobierno soviético dirigido por Lenin. El nuevo gobierno revolucionario firmó con Alemania el Tratado de Brest-Litovsk (marzo de 1918). Los oficiales antibolcheviques formaron el llamado “ejército blanco”, que se enfrentó al «ejército rojo», dirigido por León Trotsky, en una cruel guerra civil (1918-1920). La contienda, que dejó ocho millones de víctimas, terminó con la derrota del «ejército blanco» y el afianzamiento de una revolución.
EL NACIMIENTO DE LA URSS
En 1921 Lenin puso en práctica la llamada Nueva Política Económica (NEP). En 1924 se aprobó la primera cons- titución soviética, que convertía a Rusia en la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), gobernada desde Moscú por el nuevo partido
comunista.
En 1928 Josef Stalin, implantó el comunismo puro en materia económica y estableció los llamados planes quinquenales. Stalin transformó el país en una potencia militar e industrial.
LA CRISIS DE 1929
Y SUS CONSECUENCIAS

EL CRACK DE LA BOLSA DE NUEVA YORK
En 1929 estalló la que fue, tal vez, la mayor crisis económica del capitalismo en toda su historia. El 24 de octubre de 1929, día conocido como el «jueves negro», se produjo un hundimiento espectacular de la Bolsa de Nueva York.
Las causas del desastre financiero radicaron en la excesiva confianza.
LAS CONSECUENCIAS DE LA CRISIS
Las consecuencias del crack* de 1929 fueron desastrosas. Los efectos acabaron trasladándose desde Estados Unidos al resto del mundo, transformándose ya en una crisis total (la Gran Depresión)
Las primeras consecuencias: el comercio mundial se redujo; los estados aumentaron su intervención, y se creó un clima de desconfianza en el sistema de pagos. La creciente inflación acabó con algunas economías como la alemana.
En el terreno político, la crisis propició el desprestigio del liberalismo y el auge de otras ideologías que se presentaron como salvadoras, tales como el totalitarismo de ultraderecha o los intentos revolucionarios izquierdistas.
En las relaciones internacionales se estableció la desconfianza, que acabó dima de colaboración y con el clima de colaboración y concordia suscitado por la Conferencia de Locarno.
LAS SOLUCIONES A LA CRISIS
Algunos estados promovieron la autarquía o autosuficiencia económica.
La mayoría recurrieron al clearing, a la intervención del Estado en la economía y a la creación de empresas estatales, siguiendo las propuestas de John Maynard Keynes.
En EE.UU., el presidente Franklin Delano Roosevelt adoptó un conjunto de medidas conocido como New Deal (ayudas estatales, mantenimiento de los precios agrícolas, grandes obras públicas, etc.).
EL ASCENSO
DE LOS TOTALITARISMOS

LA CRISIS DE LA DEMOCRACIA LIBERAL
La catástrofe que supuso la Primera Guerra Mundial, ayudó a formar una corriente de opinión contraria al sistema democrático. En Europa central, oriental y meridional (Austria, Alemania, Polonia, Yugoslavia, Bulgaria, Italia, España y Portugal), fracasaron los sistemas democráticos y se alzaron nuevos regímenes autoritarios (sometidos a un jefe único) y totalitarios (de partido único).
Los partidos totalitarios se caracterizaron, además, por ser ultranacionalistas (exaltación extrema y radical de lo «nacional» o propio, frente a lo «extranjero» o extraño; uso y manipulación de la historia), militaristas (prestigio del poder militar, uso común de uniformes y correajes), racistas e intervencionistas (el Estado impone los precios, prohíbe las huelgas, regula los salarios). Alcanzaron su mayor fuerza en Italia y Alemania.
EL FASCISMO ITALIANO
El fascismo fue obra de Benito Mussolini, quien en 1919 fundó los Fascios Italianos de Combate, «camisas negras». Se trataba de un grupo político, organizado en escuadras paramilitares, que se oponía violentamente a los piquetes socialistas que paralizaban los transportes y ocupaban las fábricas.
En 1922 organizó la Marcha sobre Roma. Una vez en el poder y convertido en Duce (Jefe), desmanteló violentamente la oposición e implantó una dictadura legal, y acometió importantes reformas políticas y económicas.
EL NAZISMO ALEMÁN
Al finalizar la Primera Guerra Mundial, la República de Weimar atravesó graves dificultades políticas y económicas. En este ambiente nació, en 1920, el Partido Nacionalsocialista de los Trabajadores Alemanes (NSDAP), dirigido desde 1921 por el Führer (literalmente, «Guía’) Adolf Hitler. En pocos meses los nazis convirtieron la República en el Ter;er ReichEn el terreno económico el régimen nazi obtuvo diversos éxitos.
LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL
Y SUS CONSECUENCIAS

CAUSAS Y CARACTERÍSTICAS DE LA GUERRA
Causas:
• Causas generales: espíritu revanchista, aparición de ideologías totalitarias, auge del militarismo, empobrecimiento general y las secuelas de la crisis de 1929.
• Causas inmediatas: política imperialista de Alemania, Italia y Japón, y la ineficacia de la Sociedad de Naciones.
El conflicto duró casi seis años, y en él lucharon dos bloques liderados, uno por Gran Bretaña y Francia (las potencias occidentales o aliados), y el otro por Alemania e Italia (las potencias del Eje).
LAS GRANDES CAMPAÑAS MILITARES
Primera fase de la guerra: El exito correspondió a Alemania, gracias al desarrollo de un nuevo tipo de campaña militar, la llamada Blitzkrieg o «guerra relámpago». La llamada batalla de Inglaterra fue el único fracaso del Eje. Segunda fase: Invasión de la URSS. Japón atacó la base naval de Pearl Harbour, provocando la entrada de Estados Unidos en la guerra.
Tercera fase: Los norteamericanos desembarcaron en Sicilia y avanzaron por Italia. Tras el desembarco de Normandía y la reconquista de Francia, Bélgica y los Países Bajos, los ejércitos aliados iniciaron la carrera hacia Berlín. En el Pacífico, tras las batallas de Iwo Yima y Guadalcanal, Japón se retiraba de Birmania, Filipinas y China.
LAS CONSECUENCIAS DE LA GUERRA. EL DISEÑO DE LA PAZ
Las pérdidas humanas se cifraron en algo más de 55 millones. Las destrucciones materiales fueron incalculables.
El diseño de la paz y la implantación de un nuevo orden internacional se realizó a través de las Conferencias de Yalta y de Potsdam (1945). En ellas se definieron las nuevas fronteras europeas y se decidió dividir Alemania y su capital Berlín en cuatro zonas de ocupación. Comenzaba la Guerra Fría (1945-1989).
EL REINADO DE ALFONSO XIII
LOS GOBIERNOS DE LA MONARQUÍA
El llamado «desastre del 98» había provocado el nacimiento del regeneracionismo, movimiento intelectual y político que pretendía la recuperación económica, la transformación de las costumbres y de la sociedad española, y su adaptación a los modos de vida europeos.
Los conservadores, presididos por Francisco Silvela y por Antonio Maura, gobernaron entre 1902 y 1909, mientras que los libera- les, dirigidos por José Canalejas, lo hicieron entre 1910 y 1912. A partir de 1917, el sistema político de la Restauración entró definitivamente en crisis, obligando a la formación de gobiernos de concentración nacional.
LOS PROBLEMAS INTERNOS
• El problema religioso. El partido liberal mantuvo una postura anticlerical. Los conservadores se convirtieron en el baluarte del clericalismo.
PROTAGONISTAS
Alfonso XIII (1886-1941)
Hijo póstumo de Alfonso XII, se educó bajo la regencia de su madre María Cristina de Habs- burgo-Lorena. Monarca parlamentario, en 1902 juró la constitución de 1876, reinando y gobernando en la medida en que esta se lo permitió.
Casado en 1906 con Victoria Eugenia de Battemberg, tuvo un reinado tormentoso, acosado por el espíritu crítico del 98, las continuas luchas sociales y las vicisitudes de la Guerra de Marruecos. En 1931, con la victoria de los republicanos en las elecciones municipales, aceptó la nueva situación política y abandonó el país, muriendo en el exilio en Roma en 1941.
La cuestión social: Procedía de la pobreza y marginación en la que se encontraba buena parte de la sociedad española. La problemática social y el auge del movi- miento obrero se reflejaron en la fundación, en 1888, de la Unión General de Trabajadores (UGT), de orientación socialista, y de la Confederación Nacional del Trabajo (CNT), en 1910, de tendencia anarquista.
La consolidación de los regionalismos: (catalán, vasco y gallego, sobre todo)En Cataluña, Francesc Cambó fundó la Lliga Regionalista (1901)
LA CRISIS DE 1917
El alza de los precios y el fortalecimiento del sindicalismo provocaron malestar entre las clases populares, que se expresó en la convocatoria de una huelga general el 13 de agosto de 1917, cuyo objetivo final era la instauración pacífica de una república democrática. Coincidiendo con la huelga se produjo el intento de los diputados catalanes, de reunir una Asamblea de Parlamentarios para formar la Generalitat, pero resultó un fracaso.
EL PROBLEMA DE MARRUECOS
La Conferencia de Algeciras (1906) y el posterior Tratado Hispano-Francés de 1912 asignaron a España la colonia de Río de Oro (Sahara occidental), el enclave de Sidi Ifni y el protectorado* sobre el norte de Marruecos.
Los sucesos más notables se produjeron en 1909, con el desastre del Barranco del Lobo, donde murió el general Pintos, y la Semana Trágica de Barcelona. En 1921 tuvo lugar el Desastre de Annual, una derrota militar sufrida por las tropas españolas en la que murieron más de 8 000 soldados.
LA DICTADURA DE PRIMO DE RIVERA
El 13 de septiembre de 1923 el general Miguel Primo de Rivera, dio un golpe de estado. Después, instauró un Directorio Militar*, suspendió la Constitución, disolvió las Cortes, y prometió acabar con el problema de Marruecos y la inseguridad ciudadana. En 1925 organizó un desembarco en Alhucemas.
Desde entonces, se sucedieron distintos gobiernos, mientras crecía la agitación popular. En 1930, republicanos, socialistas y catalanistas de izquierdas firmaban el Pacto de San Sebastián para terminar con la monarquía e instaurar la república. Obligado por las circunstancias, Alfonso XIII abandonó el país, proclamándose la Segunda República Española el 14 de abril de 1931.
LA SEGUNDA REPÚBLICA(1931-1936)
EL GOBIERNO PROVISIONAL. LA CONSTITUCIÓN DE 1931
El 14 de abril de 1931 se proclamó la Segunda República Española. Acto seguido, se formó un gobierno provisional. El nuevo gobierno, presidido por Niceto Alcalá Zamora, estaba formado por socialistas, republicanos y algunos personajes procedentes del régimen anterior.
El 9 de diciembre de 1931, las Cortes aprobaron la Constitución republi- cana, una constitución progresista que definía a España como una «República de trabajadores»
EL BIENIO PROGRESISTA (1931-1933)
Las elecciones de 1931 fueron ganadas por los partidos progresistas (Acción Republicana, socialistas y otros republicanos de izquierda), siendo elegido Niceto Alcalá Zamora como Presidente de la República y Manuel Azaña como Jefe de Gobierno. Este se erigió como la figura clave del Bienio, emprendiendo una ambiciosa política de reformas: Destacaron la reforma agraria, la reforma del ejército, y las reformas de la educación y del clero.
Se promulgaron también numerosas leyes sociales.
El gobierno tuvo que hacer frente a numerosos y graves problemas
A los anteriores conflictos se unieron la quema de iglesias y conventos, las huelgas en las ciudades, la ocupación de fincas y los estallidos revolucionarios en el campo, como el ocurrido en Casas Viejas (Cádiz)
EL BIENIO CONSERVADOR Y EL FRENTE POPULAR
El Partido Radical, de Alejandro Lerroux, y la Confederación Española de Derechas Autonómas (CEDA), de Jose María Gil Robles, ganaron las elecciones. La entrada de miembros de la CEDA en el gobierno supuso la paralización de la mayor parte de las reformas. Este hecho irritó a la izquierda que, además, consideraba a la CEDA como la representación de los fascis- mos en auge en Europa, provocando un estallido revolucionario en Asturias y Cataluña -revolución de octubre de 1934-
Los problemas económicos, la corrupción de algunos políticos radicales y el descontento generalizado de la izquierda acentuaron la debilidad del gobierno, obligando a Alcalá Zamora a convocar nuevas elecciones en febrero de 1936. Los partidos de izquierda se presentaron agrupados formando una gran coalición, el Frente Popular. Su triunfo permitió nombrar a Manuel Azaña presidente de la República, y a Santiago Casares Quiroga como jefe de gobierno.
LA SEGUNDA REPÚBLICA(1931-1936)
EL GOBIERNO PROVISIONAL. LA CONSTITUCIÓN DE 1931
El 14 de abril de 1931 se proclamó la Segunda República Española. Acto seguido, se formó un gobierno provisional. El nuevo gobierno, presidido por Niceto Alcalá Zamora, estaba formado por socialistas, republicanos y algunos personajes procedentes del régimen anterior.
El 9 de diciembre de 1931, las Cortes aprobaron la Constitución republi- cana, una constitución progresista que definía a España como una «República de trabajadores»
EL BIENIO PROGRESISTA (1931-1933)
Las elecciones de 1931 fueron ganadas por los partidos progresistas (Acción Republicana, socialistas y otros republicanos de izquierda), siendo elegido Niceto Alcalá Zamora como Presidente de la República y Manuel Azaña como Jefe de Gobierno. Este se erigió como la figura clave del Bienio, emprendiendo una ambiciosa política de reformas: Destacaron la reforma agraria, la reforma del ejército, y las reformas de la educación y del clero.
Se promulgaron también numerosas leyes sociales.
El gobierno tuvo que hacer frente a numerosos y graves problemas
A los anteriores conflictos se unieron la quema de iglesias y conventos, las huelgas en las ciudades, la ocupación de fincas y los estallidos revolucionarios en el campo, como el ocurrido en Casas Viejas (Cádiz)
EL BIENIO CONSERVADOR Y EL FRENTE POPULAR
El Partido Radical, de Alejandro Lerroux, y la Confederación Española de Derechas Autonómas (CEDA), de Jose María Gil Robles, ganaron las elecciones. La entrada de miembros de la CEDA en el gobierno supuso la paralización de la mayor parte de las reformas. Este hecho irritó a la izquierda que, además, consideraba a la CEDA como la representación de los fascis- mos en auge en Europa, provocando un estallido revolucionario en Asturias y Cataluña -revolución de octubre de 1934-
Los problemas económicos, la corrupción de algunos políticos radicales y el descontento generalizado de la izquierda acentuaron la debilidad del gobierno, obligando a Alcalá Zamora a convocar nuevas elecciones en febrero de 1936. Los partidos de izquierda se presentaron agrupados formando una gran coalición, el Frente Popular. Su triunfo permitió nombrar a Manuel Azaña presidente de la República, y a Santiago Casares Quiroga como jefe de gobierno.
LA GUERRA CIVIL (1936-1939)
LA DIVISIÓN EN DOS BANDOS
El alzamiento militar del 18 de julio de 1936 desembocó en una guerra civil que se prolongó hasta el 1 de abril de 1939. Causas: en definitiva, las enormes diferencias sociales existentes.
España quedó dividida en dos zonas, la «nacional» y la republicana o «roja’. Los sublevados, llamados a sí mismos «nacionales», controlaron la España rural y contaron con el apoyo del ejército, la Iglesia y las clases altas y medias. Los republicanos, partidarios de la legalidad constitucional y de la República, mantuvieron las zonas industriales y urbanas.
EL DESARROLLO DE LA CONTIENDA
El principal objetivo de los sublevados fue la toma de Madrid. Para lograrlo, utilizaron pequeñas unidades de avance rápido y transporte motorizado. Pero Madrid resistió el ataque, venciendo el ejército republicano en las batallas del Jarama (1936) y Guadalajara (1937).
La guerra se convirtió en un problema internacional. La República fue ayudada abiertamente por la URSS, y contó con la ayuda directa de las Brigadas Internacionales. Los sublevados contaron con la ayuda de la Italia fascista.
En 1937 el Frente Nacional se desplazó al norte, donde el general Francisco Franco buscaba controlar el potencial minero y siderúrgico de la zona. La dureza de los combates se reflejó en el bombardeo de la ciudad vasca de Guernica. A partir de 1938, tras las batallas de Teruel y del Ebro, las ofensivas nacionales dividieron la zona republicana en dos. El 1 de abril de 1939 terminaba la guerra.
LAS CONSECUENCIAS DE LA GUERRA CIVIL
Terrible huella de destrucción humana y material.300 000 personas muertas, exiliados (350 000) y heridos. Economía arruinada.
ESPAÑA BAJO EL FRANQUISMO.
POSGUERRA Y AUTARQUÍA

LA EVOLUCIÓN DEL RÉGIMEN FRANQUISTA
• Entre 1939 y 1959 se sentaron las bases legales del nuevo Estado, se practicó una política de autosuficiencia económica (autarquía) y el país vivió aislado de la comunidad internacional hasta 1955.
• Entre 1959 y 1975 el régimen salió del aislamiento internacional y abandonó la autarquía económica. España vivió la Época del Desarrollo
LOS FUNDAMENTOS IDEOLÓGICOS
Y SOCIALES DEL FRANQUISMO

El régimen franquista se manifestó,como profundamente antidemocrático y enemigo de las libertades. El régimen franquista encontró sus principales apoyos sociales en la Igle- sia católica, en la Falange Española y en el Ejército.
LA EVOLUCIÓN POLÍTICA ENTRE 1939 Y 1959
Al finalizar la guerra, el régimen inició su consolidación institucional con la Ley Constitutiva de las Cortes (1942) y la promulgación del Fuero de los Españoles (1945). Con estas medidas se iniciaba la llamada «democracia orgánica’. Poco después se promulgaba la Ley de Sucesión en la Jefatura del Estado, por la que España se constituía como reino y se declaraba un estado «católico, social y representativo» bajo la jefatura vitalicia de Franco.
Las relaciones internacionales durante este período estuvieron llenas de dificultades. En agosto de 1953, España firmaba un concordato con la Santa Sede, que colocaba a la Iglesia católica en una situación de privilegio. Un mes después se rubricaba el Tratado de Amistad Hispano-norteamericano, por el que se establecían en España diversas bases militares estadounidenses a cambio de ayudas económicas.
LA ÉPOCA DE LA AUTARQUÍA (1939-1959)
Franco pretendió conseguir la autarquía o autosuficiencia económica.
• El Servicio Nacional del Trigo(SNT)requisaba el cereal y controlaba su producción, distribución y consumo.
• El Instituto Nacional de Industria (INI).Organizado como un conjunto de empresas estatales, tenía por finalidad estimular la industrialización y favorecer la autarquía económica.
DESARROLLO Y FINAL
DEL RÉGIMEN FRANQUISTA

EL PLAN DE ESTABILIZACIÓN Y LOS PLANES DE DESARROLLO
Pusieron en marcha el Plan de Estabilización, un programa de saneamiento que abrió la economía española al mercado mundial. El éxito del plan permitió al Estado iniciar varios planes de desarrollo cuatrienales, que convirtieron a España en un país avanzado económicamente en la década de 1960. En siete ciudades que iniciaron la creación de polos de desarrollo industrial.
Otros motores de la economía de la época fueron el boom turístico, emigrantes españoles en Europa y la llegada masiva de tecnología y capital extranjeros.
LAS TRANSFORMACIONES SOCIALES
La población pasó de 30,5 a 33,9 millones entre 1960 y 1970, debido a las mejoras en la alimentación y en las condiciones sanitarias e higiénicas. La modernización provocó un éxodo rural sin precedentes.
Surgimiento de problemas urbanos. Muy importante fue también el nacimiento de una nueva estructura social. La mujer, se incorporó al trabajo fuera del hogar de forma creciente. La mejora del nivel de vida de la mayoría de la población influyó en la trans- formación de las costumbres, de las mentalidades y de la vida cotidiana.
LA CRISIS POLÍTICA Y EL FINAL DEL RÉGIMEN
Aumentó la conflictividad social y laboral. La oposición política, mientras tanto, se organizó en el interior y en el exterior. El sector monárquico se agrupó en torno a don Juan de Borbón, hijo del rey Alfonso XIII y padre de don Juan Carlos. El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) renovó sus cuadros dirigentes en el congreso celebrado en Suresnes en 1974, y reconstituyó su sindicato, la Unión General de Trabajadores (UGT). Por último, el Partido Comunista Español (PCE), dirigido por Santiago Carrillo, se alineó con las corrientes «eurocomunistas» que acepta- ban la democracia occidental y creó Comisiones Obreras (CCOO).
El 20 de noviembre de 1975 moría Franco y el régimen por él creado. Dos días más tarde, Juan Carlos de Borbón era coronado Rey de España.
EL INICIO DE LA DEMOCRACIA
LA TRANSICIÓN DEMOCRÁTICA
El 22 de noviembre de 1975, Juan Carlos I fue proclamado Rey por las Cortes. Se iniciaba así la transición democrática. se pasó de forma pacífica de un régimen dictatorial y personal a otro democrático.
LOS PRIMEROS GOBIERNOS DE LA MONARQUÍA
Tras un breve Gobierno de Arias Navarro, el Rey nombró presidente a Adolfo Suárez. En noviembre de 1976, las Cortes aprobaron la Ley para la Reforma Política. En octubre de 1977 se firmaron los Pactos de la Moncloa. Poco después, mediante referéndum, los españoles aprobaron la Constitución de 1978. Se imponía así el reformismo (cambio pacífico), frente a la ruptura (cambio violento), y la política del consenso frente a la de confrontación.
INFORME. LA CONSTITUCIÓN DE 1978 Y El ESTADO DE LAS AUTONOMÍAS
Constitución española de 1978: Reconoce los derechos fundamentales del individuo y proclama la monarquía parlamentaria como forma política del Estado español. La novedad mas importante de la Constitución fue el Estado de las Autonomías, que contemplaba las pecularidades y la diversidad de los pueblos españoles.

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