La Economía de EE. UU. en los Años 20: La Era de la Prosperidad

La economía de Estados Unidos en la década de 1920 se caracterizó por una serie de transformaciones y avances significativos:

• Aplicación de nuevas fuentes de energía a la industria: La electricidad y el petróleo impulsaron la producción y la eficiencia.
• Aparición de nuevas industrias de bienes de consumo: Sectores como la automoción (ej. Ford), los electrodomésticos y la radio experimentaron un auge sin precedentes.
• Nuevas formas de producción: Se consolidaron métodos como el trabajo en cadena (donde el obrero realizaba una parte específica de una tarea mayor) o el taylorismo (organización científica del trabajo).
• Reducción de costes y aumento de la productividad: Las nuevas formas de producción trajeron consigo una notable reducción de los costes de producción y un aumento de la productividad, lo que resultó en un incremento masivo de la producción.
• Aumento de la demanda: El incremento de la producción fue absorbido por un aumento de la demanda, impulsado por la subida de salarios, la popularización de la compra a plazos y el desarrollo de la publicidad.

Orígenes de la Crisis de 1929: El Fin de la Bonanza

A pesar de la aparente prosperidad económica de los años 20, a finales de la década se manifestaban claros signos de agotamiento y desequilibrio que sentarían las bases para la Gran Depresión:

• Problemas de superproducción: La producción industrial y agrícola creció por encima de la capacidad de absorción de la demanda, lo que llevó a la acumulación de existencias (stocks) en las fábricas y almacenes. Esta acumulación provocó la caída de precios y el cierre de numerosas fábricas, resultando en un aumento del desempleo y una disminución del consumo.
• Especulación bursátil: Durante los años de prosperidad, numerosos ciudadanos invirtieron gran parte de sus ahorros en la compra de acciones empresariales. Esta demanda artificial disparó el valor de las acciones, incluso de compañías con dificultades financieras reales. Se formó así una burbuja bursátil, impulsada por la especulación, donde los inversores esperaban obtener ganancias muy superiores a los beneficios reales de las empresas.
• Endeudamiento generalizado: Ciudadanos y familias se endeudaron masivamente para mantener su nivel de consumo e inversión. Los bancos, a su vez, facilitaron estas deudas mediante la concesión de préstamos arriesgados, lo que los hacía vulnerables a impagos.

El Crack Bursátil de 1929: El Jueves Negro

En el verano de 1929, comenzaron las señales de alarma con algunas ventas de acciones, provocadas por la quiebra de ciertas empresas y la creciente desconfianza. El punto de inflexión llegó el 24 de octubre de 1929, una fecha que pasaría a la historia como el Jueves Negro: millones de acciones fueron puestas a la venta en la Bolsa de Wall Street sin encontrar compradores, lo que provocó una caída drástica de su valor. El martes siguiente, el Martes Negro (29 de octubre), la situación se repitió con una nueva oleada de ventas masivas, llevando a la ruina a millones de personas y marcando el inicio de la Gran Depresión.

La Gran Depresión: Consecuencias Globales

El crack bursátil de 1929 desencadenó una profunda crisis económica y social con repercusiones a nivel mundial:

Impacto en Estados Unidos

• Muchos particulares se arruinaron al haber invertido en acciones que perdieron todo su valor.
• Estos accionistas no pudieron pagar los préstamos bancarios, lo que llevó al cierre de numerosas entidades financieras.
• Al cerrar muchos bancos, la concesión de préstamos disminuyó drásticamente y el consumo se desplomó.
• La caída del consumo obligó al cierre de numerosas empresas al no poder vender su producción, lo que generó un desempleo masivo.
• Al no existir subsidios para los desempleados, estos se vieron obligados a recurrir a la caridad y a la mendicidad.
• Aparición de Hoovervilles (barrios de chabolas) en parques y zonas exteriores de las ciudades, reflejo de la pobreza extrema.

Impacto en Europa

• Los bancos de EE. UU. retiraron los capitales depositados en los bancos europeos, lo que desestabilizó sus sistemas financieros.
• Numerosos bancos europeos quebraron, lo que redujo drásticamente la capacidad de consumo de la población y paralizó la inversión.
• Para proteger su propia industria, EE. UU. impuso aranceles a los productos europeos (Ley Smoot-Hawley), lo que provocó represalias y una drástica reducción del comercio internacional.
• El descontento social generalizado, provocado por la crisis económica, benefició el ascenso de movimientos extremistas y totalitarios, como el nazismo y el comunismo, que prometían soluciones radicales.

El Fascismo en el Poder en Italia: La Era de Mussolini

El ascenso del fascismo en Italia bajo el liderazgo de Benito Mussolini se desarrolló en dos etapas principales:

• De 1922 a 1924: Se mantuvo, en teoría, un régimen democrático, aunque Benito Mussolini ya perseguía a los opositores políticos y consolidaba su control sobre el Estado.
• A partir de las elecciones de 1924: El Partido Nacional Fascista (PNF) obtuvo la victoria gracias a la violencia ejercida contra sus rivales y al control de la propaganda por parte de los fascistas. Tras estas elecciones, Mussolini instauró una dictadura con las siguientes medidas clave:
  • Ilegalización de todos los partidos políticos, quedando únicamente el PNF como partido único.
  • Persecución y encarcelamiento de los opositores al régimen de Mussolini.
  • Sustitución del Parlamento por la Cámara de los Fascios y las Corporaciones, cuyos miembros eran todos del PNF, eliminando la representación democrática.
  • Supresión de las elecciones libres, reemplazadas por elecciones de lista única controladas por el partido.
  • Prohibición de huelgas y sindicatos obreros, que fueron sustituidos por corporaciones que agrupaban a obreros y empresarios del mismo oficio con el fin de evitar conflictos y mantener el control estatal sobre la economía.
  • Adoctrinamiento de la población mediante el control de la educación y de los medios de comunicación, así como el encuadramiento de la infancia y la juventud en organizaciones como la Opera Nazionale Balilla.
  • Control de la economía para lograr el autoabastecimiento y la realización de grandes obras públicas para crear empleo y modernizar el país.
  • Reconciliación del Fascismo con la Iglesia Católica mediante los Pactos de Letrán (1929), en los que el Papa reconocía el Reino de Italia y, a cambio, el Estado italiano reconocía el Estado de la Ciudad del Vaticano y otorgaba privilegios a la Iglesia en materia educativa.
  • Política exterior agresiva: Conquista de Libia y Abisinia con el objetivo de reconstruir el Imperio Romano y expandir la influencia italiana.

El Ascenso del Nazismo al Poder en Alemania: La Figura de Hitler

El camino del nazismo hacia el poder en Alemania fue un proceso complejo y gradual:

• En 1923, los nazis apoyaron un golpe de Estado fallido en Múnich (el Putsch de la Cervecería), por lo que Adolf Hitler fue a prisión tras ser juzgado.
• En 1925, Hitler publicó Mein Kampf (Mi Lucha), un libro escrito en prisión que exponía sus ideas políticas principales:
  • Antisemitismo: Los judíos eran considerados responsables de la decadencia alemana y de todos los males de la sociedad.
  • Antimarxismo: Socialistas y comunistas eran culpados de la derrota de Alemania en la Primera Guerra Mundial y de la inestabilidad política.
  • Necesidad de mantener la raza Aria pura, considerada superior, y la expansión del «espacio vital» (Lebensraum) para esta raza (racismo y expansionismo).
  • Creación del Tercer Reich, un imperio milenario que restauraría la grandeza de Alemania.
• Al salir de la cárcel, Hitler cambió de estrategia, optando por la vía electoral para llegar al poder. Reorganizó el partido y otorgó poder a figuras clave como: Joseph Goebbels (jefe de propaganda), Heinrich Himmler (líder de las SS) y Ernst Röhm (líder de las SA).
• Además, Hitler consiguió financiación de muchas grandes industrias alemanas, con cuyo dinero organizó numerosos actos de propaganda masiva. También se valió de su oratoria muy convincente para captar el apoyo popular.
• Gracias a todo esto, fue recibiendo cada vez más apoyos. La Crisis de 1929 fue decisiva en el ascenso de los nazis, ya que el aumento del número de desempleados y la desesperación económica les proporcionó más votos y legitimidad.
• En las elecciones de 1930, el NSDAP (Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán) se convirtió en el segundo partido más votado de Alemania.
• En las elecciones de mayo de 1932, el NSDAP obtuvo una gran parte de los votos, pero sin mayoría absoluta, lo que les impedía gobernar en solitario.
• Por ello, en enero de 1933, el presidente Paul von Hindenburg nombró a Hitler canciller, al frente de un gobierno de coalición con otros partidos de derecha, creyendo que podrían controlarlo.

Aspectos Políticos del Régimen Nazi: La Consolidación de la Dictadura

Tras llegar al poder, Hitler y el partido nazi consolidaron rápidamente una dictadura totalitaria mediante una serie de medidas:

• Tras llegar al poder, Hitler convocó elecciones parlamentarias para marzo de 1933. En plena campaña, se produjo el incendio del Reichstag (Parlamento alemán), un evento que los nazis aprovecharon para ilegalizar la propaganda comunista y socialdemócrata, debilitando a sus principales oponentes.
• En las elecciones, el partido nazi logró la mayoría absoluta junto a sus aliados, lo que les dio una base legal para sus siguientes acciones.
• El nuevo parlamento votó a favor de otorgar plenos poderes a Hitler (Ley Habilitante), quien implementaría las siguientes medidas para establecer su dictadura:
  • Eliminación de todos los partidos políticos, quedando únicamente el partido nazi como la única fuerza política permitida.
  • Creación de la policía secreta (Gestapo) para perseguir y reprimir a la oposición política y a cualquier disidente.
  • Eliminación de los rivales internos del propio Partido Nazi en la Noche de los Cuchillos Largos (junio de 1934): los líderes de las SA (Sturmabteilung), considerados una amenaza para el poder de Hitler, fueron asesinados, y las SS (Schutzstaffel) asumieron las funciones militares y políticas clave.
  • Tras la muerte del presidente Hindenburg en agosto de 1934, Hitler se autoproclamó Führer (líder supremo) y Canciller del Reich, consolidando así su poder absoluto y uniendo los cargos de jefe de Estado y jefe de Gobierno.