La crisis del moderantismo 1856-68

ETAPAS

ETAPA MODERADA   (1844-1854)


En 1844 suben al poder los moderados y Narváez es nombrado presidente de gobierno.
Fue el principal inspirador de la Constitución de 1845 (fiel reflejo de las ideas del liberalismo moderado), de la legislación del periodo y reprimíó cualquier intento de pronunciamiento. Además de la Constitución del 45 entre la legislación tendente a la consolidación de un liberalismo moderado destaca:

• Creación de la Guardia Civil con el objetivo de mantener el orden y defender la propiedad en las zonas rurales.

• Reforma de la Hacienda realizada por Alejandro Mon en la que se potenciaron los impuestos indirectos, especialmente los llamados “consumos”, es decir los que se aplicaban a los artículos básicos de consumo (comestibles, leña) y se crearon impuestos directos sobre las propiedades.

• Se aprobó un nuevo Código Penal y se inició el proyecto de un nuevo Código Civil.

• Se reorganizó la administración, con un sistema centralista basado en las provincias.

• Restablecimiento de las relaciones con la Iglesia Católica con la firma del Concordato de 1851, que pretendía mejorar las relaciones deterioradas tanto por las guerras carlistas como por las desamortizaciones.

• Las competencias educativas pasaron a manos del Estado que reguló el sistema de instrucción pública, creando diferentes niveles de enseñanza y elaborando los planes de estudio.

Desde 1849 el clima social y político se fue deteriorando. Se sucedieron varios gobiernos, salpicados por escándalos financieros y de corrupción y en 1854 se produce un nuevo pronunciamiento que dará lugar a la llamada revolución del 54 y a la llegada de los progresistas al poder.

EL BIENIO PROGRESISTA (1854-1856)


El bienio progresista comenzó con la revolución de 1854. El gobierno se vio obligado a dimitir y la reina entregó el poder a Espartero. La revolución permitíó la vuelta al poder de los progresistas, que gobernaron durante un corto período de tiempo en el que sin embargo, desarrollaron una intensa labor legislativa. Entre las principales medidas que adoptaron destacan las siguientes:

– La Ley General de Ferrocarriles, por la que el Estado se convertía en el principal impulsor de la construcción del tendido ferroviario.

– La Ley de Bancos y Sociedades de Crédito

– La Ley de Desamortización, obra de Madoz en 1855 que vino a completar la de Mendizábal. A la desamortización de los bienes de la Iglesia, se añadían ahora las propiedades rústicas y urbanas pertenecientes al Estado y a los municipios. Su finalidad era amortizar la deuda y financiar las obras públicas,  fundamentalmente el ferrocarril. Esta desamortización proporciónó al Estado rendimientos muy superiores a la de Mendizábal, pero supuso a los ayuntamientos menos recursos económicos y privó a los campesinos del uso colectivo de estos bienes.

– La Constitución de 1856, que no llegó a promulgarse.

Las medidas reformistas del Bienio no mejoraron sin embargo las condiciones de vida de las clases populares ni tuvieron en cuenta sus demandas, lo que generó un clima de gran conflictividad social. La situación provocó una grave crisis en el gobierno, Espartero dimitíó y la reina confió el gobierno a O´Donnell, que reprimíó duramente las protestas.

EL RETORNO AL MODERANTISMO   (1856-1868)


1ª Etapa

La reina nombró jefe de gobierno a Narváez Su gobierno tomará las siguientes medidas:

• Suspender la desamortización.

• Anular las disposiciones sobre la ley de prensa.

• Publicar la Ley de Instrucción Pública, promovida por el ministro Claudio Moyano, que declara obligatoria la enseñanza primaria.

La forma autoritaria de gobernar de Narváez provocó recelos en las Cortes y la reina llamó a O´Donnell para formar gobierno. Es el llamado” gobierno largo” de la Uníón Liberal que durará desde 1858 hasta 1863. Este período se caracteriza por:

• Estabilidad política.

• Progreso económico. Se continúa con la construcción ferroviaria y las obras públicas. La industria catalana alcanza un notable desarrollo y se construyen altos hornos en Asturias y País Vasco.

• Intervenciones en el exterior que buscan recuperar el prestigio internacional.

2º etapa

Entre 1863 y Septiembre de 1868 se produce una gran inestabilidad política que se reflejará sobre todo en los siguientes aspectos:

Crisis política:
El régimen isabelino fue perdiendo sus bases de apoyo. Los progresistas se negaron a seguir participando en unas elecciones fraudulentas, acercándose a los demócratas y recurriendo de nuevo a métodos insurreccionales, no sólo con la intención de cambiar de gobierno sino también para terminar con la monarquía de Isabel II.
Los demócratas por su parte fueron ampliando el número de sus seguidores entre las clases urbanas y tuvieron relación con la sublevación de los sargentos del cuartel de San Gil.

• Desde el mundo universitario aparecen también duras críticas contra el régimen, entre ellas destacan las de Emilio Castelar que será expedientado por criticar a la corona en la prensa. Los estudiantes ante este suceso deciden manifestarse en su apoyo en la llamada noche de San Daniel, en la que se enfrentaron a la Guardia Civil, con el resultado de varios muertos y heridos.

Crisis económica en los aspectos financieros (al hundirse los valores ferroviarios) e industriales. En el sector de la industria textil catalana, se produce una recesión debido a los problemas para la importación de algodón.

Crisis social producida por el descontento social al subir de forma impresionante el paro.

Ante tal situación: progresistas, demócratas y republicanos planificaron una estrategia común para acabar con el régimen y con la monarquía isabelina firmando el Pacto de Ostende, en Agosto de 1866 al que se unirán los unionistas tras la muerte de O´Donnell.

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