De que forma influye el movimiento humanista en la reforma

LA REFORMA EN Alemania

El contexto alemán: de la debilidad política interna a la supremacía del Papado

A fines de la Edad Media la fragmentación política de Alemania era tal que lo general es subrayar la inexistencia de Alemania. En el terreno religioso, esta debilidad política interna

  • impidió la formación de una Iglesia con bases propias. 
  • facilitó que el Papado negociase uno por uno con los príncipes alemanes
    • estableciendo concordatos con cada uno de ellos. Estos concordatos reforzaban la autoridad papal en materia de:
        • nombramiento de cargos eclesiásticos
        • y control de las propiedades eclesiásticas. 

En suma, la iglesia alemana dependía fuertemente de Roma,

¿Qué pensaban de todo esto los humanistas alemanes?

  • denunciaban los abusos clericales  
  • mostraron un profundo sentimiento de alemaneidad
  • rechazaron la tutela ideológica impuesta a los laicos,
  • así como el principio de la jurisdicción papal.

Ya en tiempos de Lutero había cuajado una mentalidad que identificaba el nacionalismo germano con la xenofobia contra Roma y su arrogante rapacidad. Lutero encontró el camino trillado pues la mayoría de los alemanes situaban al Anticristo en Roma y sufrían los efectos de las conexiones financieras entre los Fugger y la ciudad
Eterna.

  • las riquezas de la Iglesia,
  • la actitud mundana del alto clero y
  • los abusos en la aplicación de los medios de salvación (indulgencias, penitencias…).

También que antes de Lutero, otros pensadores habían fomentado la difusión de la Biblia al margen de la Iglesia, otros pedían reformas, otros denunciaban el comercio de indulgencias.

La devoción popular y movimientos de reforma

Lutero y los humanistas no eran los únicos en protestar contra los abusos eclesiásticos. A las agitaciones campesinas que veremos después, se suma la reacción popular contra el cambio del culto en una mera práctica externa. Esta reacción popular se manifestó de varios modos:

* A finales del XV y principios del XVI se acentúan las tendencias devotas favorecidas por la abundante edición de libros edificantes: devocionarios, misales, evangelios comentados, vidas de santos, traducciones de la Biblia (18 hasta 1521).

*
Los predicadores populares –muchos de las órdenes mendicantes- propugnan una vida más acorde con la pobreza evangélica, lo que les depara muchos seguidores.

* Igual sucede con las hermandades del rezo en común y la práctica de la caridad.

Las formas de propagar estas ideas contrarias o al margen de la religión oficial eran diversas.

* En Alemania los roperos ambulantes y las reuniones de tejedoras eran instituciones sociales que servían para propagar cualquier tipo de noticia e idea.

* Panfletos e imágenes se convirtieron en los primeros medios de comunicación de masas; en concreto, este merito recae en la xilografía, método anterior al libro impreso, a través del que se podían tirar 3 ó 4.000 estampas antes de desgastarse el bloque de madera. Se vendieron decenas de miles de estampas xilografiadas, a menudo para celebrar una experiencia religiosa; lo mismo sucedía con las medallas de metal barato que compraban los peregrinos y que eran las postales de la época. 

En Alemania hubo movimientos de protesta social y religiosa que manifiestan el descontento generalizado, apoyado en proyectos más o menos difusos de reforma.
Tres quedaron grabados en la memoria colectiva alemana y fueron referentes de la lucha de los campesinos.

  • En 1476 el pastor y músico popular Hans Böheim convirtió el lugar de peregrinaciones de Niklashausen (Franconia) en centro de agitación social y religiosa. A través de mensajes apocalípticos recibidos en apariciones de la Virgen, hablaba de un mundo libre, igualitario, sin impuestos y propiedad privada. Transmitía la ira de Dios contra el papa, clero, príncipes y señores, emperador y clases adineradas urbanas.
    • Los 40.000 peregrinos de todas partes de Alemania se hicieron propagandistas de esta utopía. El obispo de Würzburg le quemó y destruyó su capilla.
  • Desde 1493 y hasta 1517 se sucedieron rebeliones campesinas que se conocen como Bundschuh por haber adoptado la enseña del zueco campesino.
    Una de estas fue capitaneada por el siervo Joss Fritz, un líder cualificado, capaz de unir a campesinos y habitantes urbanos. Su idea era cambiar el orden social y económico, repartir las propiedades clericales, acabar con la servidumbre y la explotación a las que sometían los señores y el clero a los alemanes.
  • En la primavera y verano de 1514 el descontento provocado por la creciente presión fiscal aglutinó en Wuttemberg al campesinado y proletariado urbano en un movimiento antiseñorial dirigido por la figura del pobre Conrado.
    La desconexión del movimiento facilitó su derrota a manos del ejército de los señores.

Estos movimientos tenían una base sacra –sus partidarios se juramentaban ante los signos del Calvario- y sus protagonistas soñaban con la vuelta de tiempos viejos y la imposición de derechos divinos. Por ello se les ha denominado milenaristas.
El ambiente en el que se forjaron estas inquietudes está tras la Reforma de Lutero, pero no fue este, aferrado a la teoría de los dos reinos y respetuoso con el orden feudal, quien extrajese las consecuencias sociales de unos principios germinalmente revolucionarios. Para él el Evangelio solo hablaba de salvación espiritual, no de transformación social.

Lutero y la cuestión de las indulgencias

Es muy posible que cuando el papa León X –ese Medici que vimos al hablar de Florencia- renovó en 1514 las indulgencias para financiar la construcción de San Pedro de Roma, no supiese que estaba poniendo las bases de la división de la Iglesia cristiana.

Martín Lutero (1483-1546), un fraile alemán, protestó públicamente esta decisión por considerarla un abuso. Para Lutero y muchos miembros del clero alemán, pensadores y el grueso de la población, Roma era Las Vegas de la época, con unos banqueros como los Fugger que recaudaban las indulgencias a comisión y extendían los certificados de esas indulgencias.

Cuando Lutero denunció en 1514 la renovación de las indulgencias no era nuevo en sus denuncias al papado. Ya en 1512 había atacado la teología escolástica y sus raíces aristotélicas. Esto suscitó la misma atención pública que otras controversias entre académicos. Nadie le prestó atención. El estaba peleando con la interpretación de la Biblia mediante un perseverante esfuerzo en la ciencia de la hermenéÚtica, en pro de sus estudiantes y de los parroquianos de Wittemberg que le escuchaban los domingos. 

Pero su denuncia tardó en materializarse en algo concreto. Hubo que esperar tres años para que en Octubre de 1517 Lutero diese a conocer sus 95 tesis contra el tráfico de indulgencias.

¿Qué eran las indulgencias? Documentos que certificaban la remisión de un cierto tiempo en el purgatorio para la expiación de los pecados (de los vivos y de los muertos), que se vendían para pagar las deudas del arzobispo alemán Albrecht de Maguncia y allegar fondos para la construcción de la gran basílica de San Pedro de Roma.

  • Un dicho de la época reza: “Así que oigas cómo cae la moneda en el cofre, adivinarás que sale un ánima del purgatorio”. Esto era lo que predicaba Johannes Tetzel, emisario del arzobispo de Maguncia, cuando vendía por Sajonia las indulgencias de León X. Este sagaz vendedor ganaba en comisiones 20 veces más que un catedrático universitario.

Las tesis de Lutero se difundieron rápido por toda Alemania gracias a la imprenta y los canales de comunicación expuestos más arriba. Y, por supuesto, Lutero fue denunciado por los dominicos como sospechoso de herejía y se le invitó a comparecer en Roma ante un tribunal.

En este punto Lutero contaba con más apoyos que hacia un siglo había tenido Hus.

• Contaba con el apoyo político, la protección de Federico, el príncipe elector de Sajonia, ese al que habíamos visto fundando la Universidad de Wittemberg en la que Lutero impartía clase y al que había cedido la casa hospedería.

• También con las delicadas circunstancias en las que se encontraba envuelto el Imperio. En 1517 tiene lugar la reñida elección de emperador que aupará al cetro imperial a nuestro Carlos I.

La ruptura con Roma

El acto siguiente tuvo lugar en Leipzig en Julio de 1519. La Iglesia organizó una disputa entre el polemista Johannes Eck y el grupo de Wittemberg.  

  • Eck planteó el debate sobre la naturaleza divina o humana de la autoridad papal.  
  • Lutero alegó la existencia de las Iglesias orientales que no obedecían al Papa.
  • En este punto Eck comparó los argumentos de Lutero con los de Jan Hus. Y Lutero, en vez de distanciarse del hereje bohemio, sostuvo que muchos de las ideas por las que Hus había sido condenado eran auténticamente cristianas, y que la Iglesia no podía condenarle. En suma, Lutero acabó por rechazar el primado papal.

Lutero había arrojado el guante y Eck solo tuvo que redactar la acusación y enviarla a Roma. En Junio de 1520 León X promulgó la bula Exsurge Domine amenazando a Lutero de excomunión. 

El conflicto ya no tenía solución y en 1520 Lutero publicó varios manifiestos que eran otras tantas declaraciones de guerra, ya que en ellos:

  • Pide el apoyo del emperador y los príncipes alemanes (en el manifiesto Llamamiento a la nobleza cristiana de la nacíón alemana), les invita a convocar un concilio nacional que haga las reformas y proclama el sacerdocio universal (todo cristiano es sacerdote).
  • En otro manifiesto, solo da por validos 2 de los 7 sacramentos: bautismo y eucaristía.
  • En otro, exalta la autorresponsabilidad moral del individuo y la prioridad de la fe como instrumento de salvación.

Como colofón, en Diciembre de 1520 quema en Wittemberg la bula de su excomunión.    

Favorecidas por la vasta difusión de opúsculos y panfletos, las tesis de Lutero son apoyadas por numerosos sectores del país. Muchos humanistas –Melanchton, Zwinglio- se adhieren a la reforma. Solo había un posible arreglo con la parte católica: el Imperio.

  • En 1521 se celebra Dieta Imperial. Protegido por un salvoconducto de Carlos V Lutero acude a Worms, donde se defiende apelando a las Sagradas Escrituras. El emperador, manda quemar sus escritos. No había ya posibilidad de reconciliación alguna.

La difusión del luteranismo

  • Lutero procede a traducir la biblia al alemán, lo que le convierte en el creador de la lengua alemana escrita.
  • En 1522 Lutero sofoca violentos conflictos en Wittemberg. Esta ciudad y su universidad pasa a ser el eje de una Reforma que gana apoyos entre los intelectuales:
    • Las posiciones de primera hora de Lutero fueron saludadas con gozo y esperanza por los humanistas. Parte de sus efectivos constituiría la base del reclutamiento luterano: Spalatino, Justus Jonás, Melanchton.
    • También se adhiere a la Reforma el grupo de artistas de Durero y Hans Sachs.
  • La Reforma se extiende a Ulm, Nordlingen, Magdeburgo y Bremen.
    • Se procede a la clausura de conventos y a la disolución de órdenes monásticas.
    • Se deroga el celibato eclesiástico obligatorio. Lutero se casa en 1525 con la exmonja cisterciense Catalina de Bora. Entre los cinco testigos de su boda estaba Lucas Cranach el viejo, retratista de ambos y de los padres de Lutero.
  • Los príncipes siguen con entusiasmo la Reforma y secularizan los bienes de la Iglesia.
  • Pero no todos son éxitos y apoyos. La polémica con Erasmo acerca del libre albedrío y su rechazo de esta doctrina, además de un debate de altura, fue el revelador de la incompatibilidad de dos antropologías: el optimismo en el hombre quedaba aniquilado por el pesimismo luterano, y el humanismo fue vencido por la Reforma.
    • Muchos humanistas, sobre todo los de la generación más vieja, vieron frustradas sus expectativas -Reuchlin, Pirckheimer, Mutianus Rufus, Crotus Rubeanus, y todo un símbolo como Erasmo- y abandonaron el luteranismo.

La guerra de los campesinos alemanes de 1525

Lutero no solo decepciónó a los humanistas. También a  los campesinos.  

  • Estos no se limitaban a reclamar la facultad de elegir a sus propios párrocos.
    • Exigían una reforma del régimen de diezmos,
    • la abolición de la esclavitud y
    • la recuperación del uso de muchos derechos comunitarios.
  • Así el Evangelio (o lo que de él se interpretaba), adoptado como ley reguladora, era un arma para oponerse al progresivo sometimiento campesino consolidado en el Siglo XV.
  • Los obstáculos a la movilidad personal, el aumento de las prestaciones y de la población contribuyeron a incrementar la agitación en el campo, donde el poder se concentraba cada vez más en las mismas personas en contra de las comunidades.

Como ya vimos, la guerra de los campesinos no fue la primera insurrección campesina en Alemania sino más bien la última de una serie de alborotos rurales.

  • Sus protagonistas no fueron rústicos villanos –es decir, campesinos hambrientos- ni solo campesinos. El movimiento no fue exclusivamente rural.
    • También intervinieron mineros y habitantes de las ciudades en no pequeño número (sobre todo, los pobres de los suburbios urbanos).
    • Tal vez podríamos llamarla “la Reforma del Pueblo” o una rebelión de las “gentes del común”. Pero tuvieron sus líderes, algunos de ellos “clérigos” (Müntzer), así como otras gentes letradas, y soldados profesionales. 
  • El centro de la revuelta estuvo en la Alta Suabia, y se extendíó a Alsacia, Sarre, Wurtemberg, Franconia, Turingia, Suiza y el Tirol. Uno de los focos primeros, el de la Selva Negra en Franconia Superior, dio la sensación de ser el mejor organizado.

 Los grandes problemas de los revoltosos fueron:

  • Su falta de preparación
  • Su incapacidad de idear y poner en práctica una alternativa al sistema vigente.
  • su talante, relativamente moderado, se manifiesta en los Doce artículos.

Con todo, hubo distintos movimientos:

  • Florián Geyer líderó el de Rothenburg e ideó un parlamento campesino.
  • Más tarde, en el Tirol, Michael Gaismair estuvo más influido por Zuinglio.
    • Soñó con una república campesina del Tirol igualitaria, con comunidades por células, y con el comercio, minas y posesiones eclesiásticas y señoriales estatalizadas. Era un nuevo orden sin iglesia, pero profundamente cristiano. Fue el último rescoldo de la ebullición, apagado sin contemplaciones.

Su debilidad no solo fue ideológica. También organizativa y sobre todo militar.

  • Además, los grandes cabecillas de la Reforma –Melanchton, Lutero, Zuinglio- acusaron rápidamente a los campesinos de insubordinación diabólica.
    • La primera respuesta de Lutero fue una templada Exhortación a la paz.
    • El movimiento de Muntzer cerca de la Sajonia Luterana explica la posterior respuesta de Lutero en su Contra las Hordas ladronas y asesinas, en la que muestra un menosprecio hacia los rebeldes y su influjo directo en la terrible represión. Lutero escribíó “es necesario hacerlos trizas, estrangularlos, degollarlos, en secreto y públicamente, como se aniquila a los perros rabiosos”.
  • La postura de los campesinos, que al principio pretendía ser pacífica, se convirtió en violenta ya entre Marzo y Abril de 1525. Pero ya el 16 de Mayo las tropas del duque de Lorena se dirigieron contra los campesinos y les derrotaron. Se ha calculado que el número total de víctimas entre los campesinos ascendíó a más de cien mil.

Razones del éxito del luteranismo

  • La sintonía con los problemas de su tiempo fue el factor decisivo de la rápida expansión del luteranismo. Antes de morir Lutero, el Evangelio se había extendido por las ciudades del sur y el centro de Alemania, el este y norte del Imperio, la Prusia secularizada, los dos países escandinavos. 
  • Esta sintonía explica el apoyo de amplios sectores sociales a la Reforma:
    • La entusiástica acogida por los señores y ciudades alemanas se explica por el anhelo de orden religioso a causa de las dejaciones anteriores del papado.
    • Además, la Reforma confirió a los Estados en los que se implantó:
      •  el control sobre áreas tan significativas como la asistencia social, la enseñanza, la atención pastoral,
      • transfirió al poder civil los recursos económicos que el clero se atribuía para cumplir estas misiones sociales.
        • Facilitó la secularización de estas funciones
        • y la desamortización de los bienes e ingresos espiritualizados e imprescindibles para los estados necesitados de recursos. 
  • La rápida expansión del luteranismo también contó con el apoyo de la lejanía del emperador –nunca estaba donde debía-, lo que las oligarquías aprovecharon para hacerse con los recursos económicos y las áreas de poder dejadas por el clero.
    • También influyó, el espíritu nacionalista de los países escandinavos, necesitados –como los príncipes territoriales alemanes- de los bienes secularizados de la Iglesia romana antigua. 
  • Los canales de comunicación de información utilizados por los luteranos.
    • La reforma no se entendería sin la penetración de los predicadores:
      • los primeros propagadores de Lutero fueron curas y, sobre todo, frailes, entusiasmados por la nueva fe.
      • Llevaron la Reforma:
        •  a los municipios, y a los obispos y príncipes reformados.
      • Mediante el sermón, al pueblo, en gran medida analfabeto.   
    • Para círculos más lejanos estaba la imprenta.
      Lutero se vanagloriaba de que la imprenta era el mejor medio para acabar con el papado. Sin la capacidad multiplicadora de la imprenta, su Reforma hubiera sido un movimiento localizado o efímero, atado al manuscrito al igual que las herejías medievales.
      • ¿Qué tenía la imprenta para cambiar el mundo de esta manera?
        • Un factor numérico: dado que en la segunda mitad del XV la difusión del invento de Gutenberg había acabado por convertir al medio –la imprenta- en el mensaje, los impresores exigieron cada vez más originales comercializables. El efecto: en 1500 habían salido de las prensas europeas unos 27.000 títulos, tres de cada cuatro en latín.
        • Un factor cualitativo: La imprenta tuvo tal efecto sobre la gente de letras que fue el cambio más grande desde que el códice con páginas reemplazó al libro en forma de rollo. 
          • Los intelectuales podían desarrollar sus estudios y polémicas en bibliotecas más grandes, lo que eliminaba la necesidad de viajar,
          • y con la ayuda de índices, bibliografías y ediciones diversas podían comparar, cotejar y editar.
          • Y cada vez más no eruditos iban saliendo de la tradición oral para entrar en el ámbito del texto escrito, supieran leer ellos mismos o no.
    • Uno de los principales logros del luteranismo –que se extendíó luego a otros países- fue el uso de las lenguas vernáculas y su simbiosis con la imprenta en el Siglo XVI.
      Esto fue debido a la apuesta reformadora por traducir la Biblia a las lenguas vernáculas, lo que convirtió a esta nueva Biblia en el instrumento más importante del nacionalismo cultural (especialmente para los protestantes).  
      • La traducción alemana ocupó a Lutero y sus ayudantes desde 1521 a 1534. Se entiende así su lamento: “Dios mío, qué difícil es hacer que los autores hebreos hablen en alemán”.
      • Contra la costumbre papista de leer en latín, la Biblia luterana era apta para doctos y analfabetos, pues el suyo era un alemán para ser leído y oído. Dotó a los alemanes con la palabra de Dios como si hubiera sido hablada en su idioma. En un idioma no nuevo, pero si renovado, unificador de las variedades anteriores. Convertida la lectura de la Biblia en mensaje de salvación, salíó de los templos, se desembarazó del latín y entró en las casas.
      • Una brecha se abríó entre los pocos que leían: Alemania católica siguió leyendo en latín; la luterana lo hacía en el Neuhochdeutsch.
      • Proscrita prácticamente la Biblia vernácula para los laicos católicos, entre los protestantes fue agente decisivo de alfabetización y revelador de una mentalidad religiosa especial.           

LAS OTRAS REFORMAS

La Reforma social de Thomas Müntzer

Primero fue seguidor de Lutero y estuvo en Wittemberg en 1517. Pero sus ideas religiosas tenían orígenes tan diversos –desde los místicos alemanes bajomedievales al Corán- que se distinguían por un sincretismo que devénía en una religión de catarsis drásticas. Consideraba a Lutero “Hermano de la Blanda Vida” y vocero de una fe fácil, sin obras ni sufrimiento.

  • En 1521 líderó los disturbios del centro textil de Zwickau e hizo causa común con un grupo de “profetas” autodidactas encabezados por el pañero Niklas Storch. Desde allí Muntzer marchó a Praga, la cuna del husitismo, donde publicó un manifiesto en el que atacaba a los fariseos que solo miran la letra de la religión.
  • El manifiesto no tuvo eco y Müntzer regresó a Sajonia, donde con su carisma logró apoderarse de Allstedt, una villa donde:
    • elaboró una liturgia completa en alemán y con himnos,
    • organizó una partida de seguidores adictos o cristianos “auténticos”.
  • La obra de Müntzer preocupó a las autoridades y fue convocado para explicarse a una audiencia con los príncipes electores de Sajonia. Müntzer se explicó pronunciando el más memorable de los sermones, en un siglo de grandes sermones.
  • Tras criticar duramente a los príncipes, se fugó y predicó en Mühlhausen, en medio de una insurrección que saqueó los conventos, desterró al alcalde y a los concejales.
    • Fundó la Liga Eterna de Dios, cuyo estandarte era un arco iris y el lema “Siempre obedientes a la palabra del Señor”.
    • Estos disturbios tenían lugar en el trasfondo de la guerra de los campesinos, de la que Müntzer fue una de las fuerzas más incendiarias, aunque periférica.
      • Su versión del Evangelio fue milenarista y violenta, al menos en sus metáforas, en las que hablaba de cosechas, guadañas y trillas.
      • Tenía también un programa social. 
  • Los insurgentes, entre los que había miembros de los grupos formados por Müntzer en Allstedt y Mühlhausen, se concentraron en Frankenhausen donde los ejércitos de los caballeros no solo les derrotaron sino que realizaron una matanza de 6 a 8.000 campesinos. Muntzer fue torturado y devuelto a Mühlhausen, donde se le decapitó.

La Reforma cívica de Zwinglio

La oposición de los partidarios de Lutero –príncipes electores y caballeros- acabó con la reforma auspiciada por Müntzer, pero no con otra alternativa radical que empezaba a cobrar forma en Suiza, una coalición de repúblicas confederadas campesinas y de ciudades que tenía su principal fuente de ingresos en dotar de ejércitos mercenarios a las potencias de la época.

  • Ulrich Zwinglio (1484-1531), un oriundo de un valle alpino del cantón de Gall, había sido capellán de uno de esos batallones y estuvo en la terrible batalla de Marignano (1515), donde la artillería francesa mató a 10.000 suizos. Esto le convirtió en un patriota opuesto a la tradición mercenaria.
    • Esto y un programa de estudios que le llevó a relacionarse con los humanistas en Basilea, Viena y otra vez Basilea, le convirtieron en el reformador que fue: no “religioso” en el sentido que asociamos a Lutero; de hecho, Zwinglio encarna el modelo de reforma cívica.
  • Instalado en Zurich como capellán párroco desde 1516, inició en 1519 un programa de cambio de las costumbres religiosas más drástico que cualquiera ideado por Lutero.
    • Tras algunos cambios que apuntaban a la libertad del cristiano para atenerse solo a las Escrituras y no a Roma, Zwinglio anunció su boda dejando claro al obispo que no era un concubinato o una barragánía, sino un matrimonio real.
    • Desde aquí todo lo que fuese romano –las indulgencias, las obras de penitencia, el culto a los santos, la vida monástica- quedó en tela de juicio.
      • En  1522 se opuso abiertamente a los abusos eclesiásticos.
      • En 1525 abolíó la misa romana:
        • la comunión de la pascua se administró ya no desde un altar, sino desde una sencilla mesa de madera.
        • Se comulgaba en las dos especies, que se llevaban al lugar donde estuviese sentado el fiel.
        • En Zurich solo había dos sacramentos: bautismo y comunión.
        • Un ministerio de pastores reemplazó al orden episcopal.
        • El matrimonio se convirtió en ceremonia civil.

Los cambios respetaron a las autoridades de una ciudad bien administrada.

En 1529 Zwinglio protagonizó una seria controversia con Lutero en materia eucarística.

  • Zwinglio creía que en la eucaristía se conmemoraba la ofrenda que hizo Cristo de sí mismo. Cristo estaba en la mente de todos, pero subíó a los cielos para sentarse junto a Dios padre. Por tanto, no podía estar en el pan y el vino, y decir otra cosa era no entender la naturaleza de un Dios al que se debía adorar “en espíritu y en la verdad”.

Para Lutero estas opiniones eran anatema. Aunque había rechazado la transustanciación, seguía creyendo en la presencia real de Cristo en la eucaristía, sencillamente porque Cristo lo dijo y, por tanto, era preciso creerlo.

En sintonía con la falta de acuerdo entre Lutero y Zwinglio, en la Dieta de Augsburgo de 1530 los seguidores de ambos reformadores presentaron confesiones de fe distintas. Ni siquiera al nivel de la alta diplomacia se ponían de acuerdo los protestantes.

  • En esta tesitura, Suiza no tardaría en presenciar la guerra entre los protestantes de las ciudades y los católicos de los cantones interiores y menos cultivados. Muerte de Zwinglio tras la batalla de Kappel.
    • Zwinglio se puso al frente de un ejército muy disciplinado, pero en 1531 perdíó la vida en la batalla de Kappel.
    • Con su muerte la reforma suiza resultó casi aniquilada por los católicos, pero su sucesor –Bullinger- rechazó la conciliación con los luteranos.

En 1539 comenzaron las negociaciones con los calvinistas de Ginebra.   

La Reforma sectaria de los anabaptistas

En contraste con el modelo cívico de reforma proliferó también un no conformismo sectario, que negaba que cualquier magistratura o Estado tuviese cabida dentro del cristianismo auténtico. Los seguidores de esta doctrina fueron llamados anabaptistas.

  • Se ha reducido el anabaptismo a la negativa a bautizarse de niños con vistas a realizar un bautismo adulto y responsable. Pero el movimiento anabaptista implicaba más cosas que el bautismo. La ruptura con el cristianismo que consagraba este rito era precisamente el paso que los llamados reformadores no se habían atrevido a dar.
    • Los anabaptistas abogaban por crear sociedades electas sin necesidad de Iglesia, sacramentos (pese al valor simbólico del bautismo adulto), Estado, ni en su expresión más radical, propiedad privada.
    • Querían devolver la Iglesia a la situación de secta que tenía primitivamente.
  • Los anabaptistas sabían lo que conllevaba su doctrina: las leyes del Imperio castigaban con la muerte a los que renunciaban al bautismo infantil.

El anabaptismo nunca se constituyó como Iglesia, pero en 1527 en la asamblea de Schleitheim, cerca de Schaffhausen, los anabaptistas se dividieron. Los más militantes decidieron:

  • que los verdaderos creyentes no deberían prestar servicio militar,
  • deberían renunciar a cualquier oficio público
  • no deberían prestar juramento, pese a que esto los descartaba de la ciudadanía activa, sobre todo en Suiza.

Pero líderes como Balthasar Hübmaier (1480/85-1528) pactaron con los poderes civiles y lograron un modus vivendi soportable con la sociedad civil. 

Los anabaptistas que renunciaron a formar parte de la sociedad civil no lo tenían fácil en la Europa del XVI. Solo tenían dos opciones:

  • Emigrar hacia tierras relativamente deshabitadas como Moravia, donde la nobleza necesitaba arrendatarios y tenía una mentalidad abierta. Los asentamiento creados por Jacob Hutter (1500?-1536) experimentaron al principio con el comunismo, compartiendo bienes y producción. Pero Hutter acabaría quemado y sus seguidores siguieron el camino de la diáspora.
  • Apoderarse de la sociedad civil y darle la vuelta, en un anticipo apocalíptico del Milenio esperado. Eso es lo que ocurríó en la ciudad de Münster, en Westfalia, donde los reformadores habían escuchado las proclamas de Melchio Hoffmann (1495?-1543), buhonero y predicador autodidacta, que profetizó el inminente fin del mundo desde la cárcel de Estrasburgo.
    • Los discípulos holandeses de Hofmann, entre los cuales estaban Johannes Matthijs (murió en 1534) y Johann Bokelson, carnicero más conocido como Juan de Leiden (murió en 1535), proclamaron que la nueva Jerusalén iba a ser Münster, y procedieron a apoderarse de la ciudad.
      • Centenares de anabaptistas fueron a Münster, y todos los ciudadanos que rehusaron el bautismo fueron amenazados con ser ejecutados y expulsados. Durante 1534 y1535, mientras el obispo sitiaba la ciudad, en su interior se llevaba a cabo la utopía democrática partiendo de la iluminación interna del Espíritu. El ensayo de la Nueva Sion (1535) de Münster, con Juan de Leyden como el rey de una sociedad comunista y polígama, fue el modelo más extremo de una especie de teocracia.
      • Finalmente, cuando la ciudad cayó ante las tropas de Felipe de Hesse y el obispo, el rey Juan de Leyden y otros seguidores fueron torturados con hierros candentes, ejecutados, y sus cadáveres metidos en jaulas y colgados de la torre de la iglesia. Allí continuaron los esqueletos hasta el siglo de la ilustración, y allí siguen aún las jaulas.
      • La represión violenta y cruel fue el final de ensayos demasiado precoces. El anabaptismo mostró que los señores y los reformadores ortodoxos (Lutero, Zwinglio, Calvino) no estaban dispuestos a consentir subversiones de profetas celestiales.     
  • Las primeras ejecuciones de anabaptistas sucedieron en Zurich por el procedimiento de ahogarlos arrojándolos al rio Limat. En 1530 eran centenares las ejecuciones de anabaptistas en el sur de Alemania, Austria y Suiza. En una era de mártires, el martirologio anabaptista excede bastante la suma de protestantes y católicos.
  • La causa anabaptista se salvó de la desaparición gracias al clérigo holandés converso al anabaptismo, Menno Simons (1496-1561), que pastoreó con paciencia a los que se salvaron de la represión hasta convertirlos en una iglesia congregacional.

Practicaron el bautismo de creyentes y renunciaron a todo cargo público, pero sin resistencia activa. Hoy sobreviven más de  millón de mennonitas. 

La Reforma teocrática de Calvino

Cuando el francés Jean Calvino (1509-1564) llegó a Ginebra en 1536 la ciudad tenía 10.000 habitantes y era mayor que Zurich o Berna. La ciudad acababa de conquistar su independencia. 

  • Su libro que iba a cambiar el mundo era Institutio Christianae Religionis (“Institución de la religión cristiana”).
    • La Institutio o Enseñanza, en su origen era una especie de catecismo, con solo seis capítulos en su primera edición de 1536. 
    • Su programa consistía en cursos acelerados de instrucción (catequesis), comunión mensual, excomunión de los recalcitrantes y un tribunal eclesiástico que impusiese la disciplina. Donde quisiera que hubiese magistrados cristianos, su jurisdicción y gobierno era suficiente tanto para los asuntos eclesiásticos como para los civiles.
    • Calvino defendía que el hombre estaba predestinado a la salvación o la condenación. Podía salvarse quien santificase la vida cumpliendo sus deberes según las sagradas escrituras.
    • Frente a Lutero, Calvino preconiza la separación Iglesia-Estado, con predominio de la primera.    
  • En 1536 Calvino centra sus actividades en Ginebra. Y, pese a que fue expulsado de la ciudad en 1538 por su rigorismo religioso, volvíó en 1541 para introducir unas Ordenanzas Religiosas.
  • A partir de entonces Calvino logró que Ginebra se plegase a la voluntad del señor con la palabra. Fue un asalto incesante a los oídos, un sermón todos los días y tres los domingos. De ellos, el mismo Calvino aportaba 260 sermones al año. Nunca quiso que sus sermones quedaran fijados en el papel, pero fue escritor prolífico.
    • Calvino hizo de Ginebra un destacado centro de publicaciones protestantes, así como Lutero hizo afortunados a los impresores de Wittemberg.
      • La ciudad incluso se hizo con una nueva industria, la del papel.
      • Entre 1550 y 1560 se establecieron en Ginebra 130 refugiados impresores y libreros, entre los cuales destacan dos nombres, Jean Crespín y sobre todo el parisino Robert Estienne, uno de los más famosos editores en francés.
      • La oferta pasó de 137 títulos en los años 1540 a 527 entre 1551-64.
  • En Ginebra acabó por asentarse una rígida teocracia que controlaba la vida pública y privada, y perseguía a los disidentes. Miguel Servet fue quemado en 1553.   

Cuando Calvino muere en 1564 una marea de refugiados –expulsados por Lutero o por los católicos franceses- afluía a la superpoblada Ginebra, pero también comenzaba a moverse en sentido contrario, conforme iban regresando convertidos en pastores y colporteurs (vendedores ambulantes de catecismos ginebrinos destinados a los semianalfabetos).

  • Sobre todo hacia Francia, donde el calvinismo ganó miles de adeptos, sobre todo en el Midi. En 1560 había en Francia cerca de dos millones de protestantes, el 10 por ciento de la población, más de lo que nunca volvíó a haber en la historia de Francia.
    • Esto fue posible no sin persecución y violencia. De hecho, el aumento de la polarización social y la debilidad del estado francés explica que en Francia se radicalizase el conflicto religioso y hubiese una profunda división entre católicos y hugonotes (calvinistas franceses).
      • Estos factores explican también que entre 1562 y 1598 se contabilizasen 8 guerras contra los hugonotes.   
  • El calvinismo se distinguíó por ser el movimiento reformador más internacional. Los protestantes calvinistas tenían un credo y una causa que trascendía las fronteras.     

El Arte de las Reformas

  • Los luteranos fueron los menos iconoclastas de todas las tradiciones protestantes


    • Con todo, la agitación iconoclasta tuvo sus orígenes en la misma Wittemberg de Lutero. En su ciudad, entre los años 1521-1522 y aprovechando la ausencia de Lutero, un movimiento liderado por Carlostadio, se dedicó a destruir imágenes de las iglesias.
    • Por esas fechas, el mismo Carlostadio escribíó un manifiesto titulado De la abolición de las imágenes (1522) en el que reveló la psicología del iconoclasta:
      • “Mi corazón se ha criado desde la infancia en la veneración de las imágenes, y con ella ha entrado dentro de mí un temor tal, y tan nocivo, que haría cualquier cosa por librarme de él, pero no puedo”.
    • Del temor se pasó a creer que las imágenes eran peligrosas. El mismo Carlostadio creía que había “que alejar  de los débiles esas cosas horribles, y quitárselas de las manos”.
    • Y algunos de los más allegados a Lutero como Melanchthon se dejó convencer en este punto por Carlostadio y la predicación de Gabriel Zwilling (1487-1558), un seguidor del mismo Lutero, pero que quemó figuras y retablos personalmente, y empujó a sus alumnos a destruir imágenes cuando Lutero estaba alejado de Wittemberg,
    • Al regresar, Lutero censuró lo hecho por Carlostadio y sus correligionarios.
      • Se sabe que Lutero no tenía excesivo apego a las imágenes, pero vio con complacencia el afecto que creaban en los cristianos corrientes. Tal vez porque opinaba que se les debía consentir estas cosas al pueblo, al igual que a los niños se les consienten los juguetes, es posible que hoy sigamos viendo las grandes iglesias de Nuremberg como reliquias en todo su esplendor del arte tardomedieval y renacentista.

En suma, para la Reforma luterana, la iconoclastia fue transitoria y periférica.

  • En cambio, la iconoclastia fue inseparable de la Reforma suiza de Zwinglio.
    • Este, que sabía y mucho de música, rechazaba la música sacra. Solo apoyaba la música en el mundo secular. Pero en lo tocante a Dios era de una intransigencia absoluta.  
    • Por ello, la plasmación de la reforma de Zwinglio en el terreno artístico se puede definir de la siguiente manera;
      • Templos de estilo austero, paredes enjalbegadas, ventanas de vidrio incoloro, mobiliario sencillísimo, nada de órgano.
    • ¿Qué había tras esta elección de estilo?
      • El rechazo absoluto de Zwinglio a una religión sensual
      • La defesa de una idea: si Dios era un espíritu invisible e intangible, debía ser adorado de la misma manera, espiritualmente.
        • En este punto, el pensamiento de Zwinglio sintonizaba con una tradición antigua del sentimiento herético en Inglaterra, la de la hostilidad a las imágenes que había distinguido a los seguidores de Wicliff o lolardos.

Una serie de preguntas nos asaltan al hablar de Arte y Reforma

  •  ¿Qué fue de los artistas?
  • ¿Tuvieron que cambiar de estilo?
  • ¿Se convirtieron a la nueva religión?
  • ¿Cómo lo hicieron?

En este punto es necesario distinguir otra vez entre las tradiciones luterana y zwingliana.

  • En el área de asentamiento de la Reforma Zwingliana los artistas que habían realizado obras figurativas religiosas no tuvieron más remedio que emigrar.
    Eso es lo que le ocurríó al pintor alemán Hans Holbein el Joven (1498-1543), quien tuvo que abandonar Basilea cuando las cosas se pusieron feas allí. Pasó a Inglaterra recomendado a Tomás Moro. En la patria de la reforma de Enrique VIII tuvo que dejar de pintar escenas religiosas. Sin embargo, Enrique le permitíó retratarle todas las veces que le vino en gana.
  • En la Alemania luterana la Reforma vino acompañada de una efervescencia de las artes figurativas vinculadas con la xilografía y la imprenta.
    La Reforma inicial utilizó las artes figurativas como propaganda contra el Papa y demás símbolos de la religión no reformada. Por ello abundan las imágenes y libros ilustrados con xilografías en donde no ahorran escarnios al Papa (que igual puede aparecer rodando por el suelo, perdiendo la tiara, humillado besando los pies del emperador o los príncipes, o representado como el Anticristo). En la primera página de este capítulo puedes ver una caricatura de 1520 en el que los propagandistas luteranos representan al papa, flanqueado por obispos y cardenales, todos con cabeza de lobos, capturando gansos en una red; el ataque contra el Papa se completa con otro a Thomas Müntzer que aparece con figura de monje y cabeza de gato tocando el acompañamiento musical a “la canción de los lobos
    • Lo cierto es que en la Alemania luterana, el cambio de religión reorientó la actividad de los artistas sin reprimirla.
      • Lo vemos en la evolución de Lucas Cranach el Viejo (1472-1553), íntimo amigo de Lutero.
        • En 1529 hizo la “imagen quintaesencial de la Reforma”, una Alegoría de la Ley y de la Gracia, llena de pedagogía teológica, y que fue multiplicada en xilografías y abundantemente copiada.
        • A Cranach no le fue nada mal, pues su “arte de la Reforma producido en masa” le permitíó edificar una de las casas más bonitas de Wittemberg, que hoy existe todavía.
          • El y su hijo Lucas Cranach el Joven (1515-1586) pintaron varios retratos de Lutero y algunos miembros de su familia, así como de Melanchthon y otros reformadores.
      • Lo mismo podemos decir del artista más grande de su época en el norte de Europa, Alberto Durero (1471-1528).
        • Eran obras hechas para vender a un público de masas, algo nuevo en la historia del arte.
        • Durero quedó impresionado por Lutero y lo describíó como “un cristiano que me ha sacado de una gran aflicción”.
        • El gran díptico de Los Cuatro Apóstoles con que Durero obsequió en 1526 a los gobernantes de Nuremberg, su ciudad natal, es un monumento al sentido bíblico protestante y marca un final de etapa frente al conservadurismo posterior a 1525.
        • Con la muerte de Durero en 1528 el arte alemán se sumíó durante décadas en una gran decadencia en cantidad y calidad.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *