Conceptos: Fascismo y Nazismo

Fascismo: Ideología autoritaria y nacionalista surgida en Italia con Benito Mussolini. Rechaza la democracia, promueve un Estado fuerte, el control social y económico, y exalta la nación por encima del individuo.

Nazismo: Variante del fascismo desarrollada en Alemania por Adolf Hitler. Añade el racismo extremo, especialmente el antisemitismo, y la idea de superioridad de la «raza aria». También es totalitario, militarista y antidemocrático.

¿Por qué se produce el ascenso de los totalitarismos en la Europa de entreguerras?

El ascenso de los totalitarismos en la Europa de entreguerras se produjo por una combinación de factores. Tras la Primera Guerra Mundial, aunque hubo una ampliación de los derechos individuales y el sufragio, los gobiernos democráticos no lograron resolver los graves problemas económicos, sociales y políticos que afectaban a la población. Esto generó desconfianza en el sistema liberal, ya que se percibía como incapaz de enfrentar los desafíos del periodo. El miedo al contagio revolucionario tras el triunfo del comunismo en Rusia llevó a muchos gobiernos a adoptar posturas autoritarias para evitar levantamientos similares en sus países. Además, la crisis económica de los años treinta, con desempleo y pobreza creciente, provocó una fuerte desilusión y polarización social. Esto llevó a una radicalización de las posturas políticas y al cuestionamiento de los valores democráticos. En este contexto, ideologías como el fascismo en Italia y el nazismo en Alemania surgieron como respuestas extremas a la inestabilidad. Ambas promovían la unidad nacional, el rechazo del comunismo y el uso de la fuerza para restaurar el orden y la grandeza nacional, desafiando abiertamente los principios liberales y democráticos.

Características de la ideología fascista

• Estado totalitario: El fascismo abogaba por un Estado con control absoluto sobre todas las esferas de la vida, negando principios liberales como la igualdad de las personas, los derechos individuales y la separación de poderes. El Estado primaba sobre el individuo.
• Dictadura de partido único y liderazgo carismático: El fascismo apoyaba un sistema dictatorial en el que solo existía un partido político. Este partido estaba basado en la figura de un líder carismático, que tenía un poder absoluto. El régimen fomentaba la obediencia y el respeto total hacia el líder, promoviendo el culto a la personalidad de este.
• Anticomunismo y Anticapitalismo: El fascismo mostraba un rechazo radical tanto al comunismo como al capitalismo. Propugnaba una “tercera vía” alternativa, que implicaba un socialismo nacional capaz de resolver los conflictos de clases, atrayendo tanto a las clases medias como a los obreros, buscando superar la desigualdad social.
• Nacionalismo Agresivo y Expansionista: El fascismo mantenía un fuerte nacionalismo que promovía la expansión territorial y militarista, exigiendo una posición de liderazgo para su nación en el contexto mundial. Esta mentalidad de expansión se traducía en un enfoque hacia la guerra.
• Racismo y Supremacía Racial: El fascismo, en su versión más extrema como el nazismo, adoptaba el racismo como un pilar central de su ideología, promoviendo la idea de una raza superior (como la raza aria en Alemania) que tenía el derecho a subyugar a otras razas consideradas inferiores. Esto incluía la persecución y exterminio de grupos como los judíos.

La política nazi: adoctrinamiento, propaganda y racismo-antisemitismo

Uno de los objetivos prioritarios del Estado nazi fue asegurar la cohesión social. Para ello, se consideraba necesario suprimir todas las impurezas que no se ajustaban al estereotipo ario. Entre 1933 y 1938 se impulsó una amplia legislación que eliminó los derechos políticos y sociales de los judíos. A finales de 1938, el antisemitismo se hizo más violento. En la noche del 9 al 10 de noviembre de 1938, tuvo lugar La Noche de los Cristales Rotos.

Resumen: Causas y Consecuencias de la Segunda Guerra Mundial

Causas

• La crisis económica: La Gran Depresión de 1929 provocó proteccionismo, ruptura de la cooperación internacional y un aumento de las tensiones sociales. Esto favoreció la radicalización política y el auge de economías totalitarias basadas en la industria armamentística y la planificación estatal.
• El desafío totalitario: Los regímenes totalitarios rompieron el orden de posguerra: Alemania, bajo Hitler, negó el Tratado de Versalles, se rearmó y anexionó territorios para formar la Gran Alemania; Italia, con Mussolini, buscó un imperio en África y el Mediterráneo; Japón quiso dominar Asia y el Pacífico, chocando con China y EE.UU. Esto generó desconfianza hacia las democracias.
• La debilidad de las democracias: Las democracias no supieron responder al avance totalitario. La Sociedad de Naciones fue incapaz de frenar sus agresiones. Francia y Reino Unido aplicaron una política de apaciguamiento por miedo a una nueva guerra y para contener el comunismo, que veían como una amenaza mayor que el fascismo. Por su parte, EE.UU., marcado por la crisis del 29, optó por el aislamiento y centró su política en América y el Pacífico, desentendiéndose de Europa.

Consecuencias

• Consecuencias Demográficas: Más de 50 millones murieron, muchos civiles víctimas de bombardeos, hambre y exterminios como el Holocausto o las represalias soviéticas. Además, 30 millones fueron desplazados, como los alemanes expulsados de Polonia, Checoslovaquia y territorios soviéticos.
• Consecuencias Materiales: Europa quedó destruida: ciudades e industrias fueron arrasadas, con graves problemas de abastecimiento y deudas. Todos los países salieron debilitados, excepto EE.UU., que se fortaleció económicamente al no sufrir daños en su territorio.
• Consecuencias Territoriales: Las fronteras cambiaron, Alemania perdió territorios y fue dividida, la URSS se expandió, Italia cedió colonias y zonas a Yugoslavia y Grecia, Japón perdió su imperio, y las potencias europeas iniciaron la descolonización. EE.UU. y la URSS emergieron como superpotencias.