Regencia de espartero resumen

LA REVOLUCIÓN LIBERAL EN EL REINADO DE ISABEL IIreinado de Isabel

II (1833-1868). etapa de regencias (1833-1843). nació en 1830, momento en el cual Fernando VII se encontraba ante un problema sucesorio. Entre los posibles candidatos se encontraba su hermano Carlos María de Isidro, ley vigente “La ley Sálica” que impedía que las mujeres gobernar. en 1830, Fernando VII dio una plasmática sanción que gobernara su hija, Isabel II. Mientras esta reina se hacía mayor están regencias.La primera regencia de María Cristina (1833-1840).Con la muerte de Fernando accedió al trono en calidad de regente, provocando el rechazo de los partidarios de Carlos María de Isidro. se produjo la división de los liberales en dos corrientes, los liberales moderados: como objetivo fortalecer la corona liberales progresistas que querrían limitar el poder del rey a favor del Parlamento y favorables a las reformas sociales y políticas. Este enfrentamiento dio lugar a la primera guerra Carlista (1833-1839). Tras un primer período muy conservador, la dirección del recayó en el liberal

Martínez de la Rosa, que dio lugar al Estatuto real formado por dos cámaras . Más tarde Conde de Toreno sustituyó a Martínez de la Rosa en la presidencia del gobierno, llevó a cabo reformas con la ayuda de Juan Álvarez Mendizábal, ministro de Hacienda.se rompieron las relaciones con la Santa Sede. La regente llamó a Mendizábal para formar el gobierno. se consumó la transición Política hacia el sistema liberal . También se reorganizó la Milicia Nacional con el nombre de guardia Nacional y se planteó acabar con la guerra carlista , con la venta de bienes del clero previamente nacionalizados. los planes de Mendizábal no dieron resultado. En la elecciones de Febrero de 1836, los progresistas ganaron las elecciones, teniendo que dimitir en mayo y pasando a ocupar el puesto de presidente Istútiz (progresista que contó con la ayuda del conde de Rivas).El 12 de Agosto de 1837, un golpe de Estado “motín de los sargentos de la Granja” establece un gobierno progresista. Proclaman la democratización en la elección de los ayuntamientos y la convocatoria de unas cortes constituyentes las cuales elaboraron la Constitución aprobada en junio de 1837 con la cual se reforzó el poder de la corona y unas cortes bicamerales por la que el Parlamento se dividió en dos cámaras separación de poderes e importancia de los derechos individuales, ley electoral de 1837, por la que el sufragio universal masculino se sustituyó por uno censitario (sufragio restringido) Las elecciones de 1837 dieron le triunfo a los moderados que gobernaron hasta 1840 poniendo fin a las Constitución de 1837. Los gobiernos moderados se vieron condicionados por el poder militar, Narváez en el liberalismo moderado y Espartero en el liberalismo progresista. Las diferencias entre los progresistas y moderados se reflejaron en la forma de afrontar la guerra:. La forma del convenio de Vergara con los carlistas provocó el motín progresista en Madrid que obligó a cambiar de gobierno. Los moderados iniciaron una ofensiva para recuperar el control del proceso político (contaban con el apoyo de la corona). La oposición de los progresistas a que la corona nombrase a los alcaldes obligó a la regente a trasladarse a Barcelona para lograr el apoyo de Espartero sobre la ley de ayuntamiento cuya firma provocó la dimisión de éste. El motín desatado en Madrid el 1 de Septiembre obligó a la regente a pedir a Espartero que lo reprimiese. Éste se negó y pidió un nuevo gobierno progresista, la disolución de las cortes y una nueva ley de ayuntamientos. Finalmente María Cristina renunció a la regencia y fue sustituida por Espartero. La segunda regencia fue la del general Espartero (1840-1843). Espartero es el líder de la corriente progresista dentro del liberalismo. Gobernó de forma autoritaria y con talante populista. Exigió ser regente único, realizó una venta de bienes del clero secular y apostó por una política librecambista lo que provocó un levantamiento de los moderados en septiembre de 1841 que fracasó por el apoyo con el que contaban. Espartero gozaba de popularidad entre las clases medias y bajas. Tenía el apoyo de gran parte del ejército Entre julio de 1843 y mayo de 1844 se desarrolló un proceso de transición en el que se pretendía desmantelar el influjo de Espartero en la sociedad y administración. Narváez y Joaquín María López (presidente del gobierno) convocaron elecciones, disolvieron la Milicia Nacional e intentaron controlar las juntas revolucionarias. Ante el posible regreso de María Cristina ambos progresistas, propusieron un adelanto de la mayoría de edad de Isabel II el 10 de noviembre. Se nombró jefe de gobierno a Olozaga (diputado progresista) el cual llevó a cabo reformas progresistas como la ley de los ayuntamiento y la rehabilitación de la Milicia Nacional, pero fue acusado de forzar a la reina a firmar un decreto de disolución de las Cortes, por lo que su carrera política acabó. Con los gobiernos de Narváez y el conflicto de de los puritanos, se inició la década moderada. Se creó una legislación que modeló un estado centralizado y uniforme. Se elaboró una nueva Constitución en 1845 la cual se basaba en los principios como la soberanía compartida entre Cortes y rey, unidad católica de España.Narváez reorganizó el gobierno de las provincias con la creación de los gobernadores civiles y perfeccionó el sistema de corrupción electoral. En Marzo hubo un pronunciamiento en Madrid, pero fracasó por la mala organización y porque Narváez actuó para reprimirlo. Paralelamente se produjo el final de la segunda guerra carlista (en la que intervino Narváez),  cuya razón fue la oposición al matrimonio entre Isabel I y don Luis (hijo de Carlos María Isidro). Más tarde llegó Bravo Murillo que fue presidente y ministro de Hacienda, quién modernizó la función pública con un real decreto de 1852 que pretendía crear una burocracia moderna al servicio del Estado. Se firmó un Concordato con la Santa Sede en 1851 el cual reconoció a la religión católica como única de la nación española, se aceptó la inspección de la iglesia sobre el sistema educativo para adecuarlo a la moral católica, se reconoció el derecho de la iglesia a adquirir y poseer bienes después de admitir la venta ya efectuadas tras la ley desamortizadora, se permitió la existencia de ordenes religiosas masculinas, se creó la contribución de culto y clero lo que suponía que el estado iba a mantener a la iglesia con cargo a los presupuestos. El fracaso de un intento de reforma constitucional en sentido autoritario, la división del partido moderado, los casos de corrupción centrados en la construcción de ferrocarriles, etc. fueron desgastando el gobierno de los moderados provocando la sublevación de los progresistas en 1854.Damos nombre a una nueva etapa llamada bienio progresista (1854-1856) en la que  se inició un pronunciamiento militar el 28 de junio “Vicalvarada” bajo el mando de los generales Dulce y O´Donell. Los sublevados se retiraron a Manzanares donde se encontraron con el general progresista Serrano, quien sugirió que el pronunciamiento tuviera un giro civil. Encargaron al joven Cánovas del Castillo la redacción de Manifiesto de Manzanares en el que se pedía una regeneración liberal, supresión de la camarilla palaciega, mejora en  la leyes de imprenta y electoral, reducción de impuestos, nueva Milicia Nacional, descentralización municipal, cortes constituyentes. El pronunciamiento derivó de una revolución Europea de 1848. Los sucesos del 17 al 19 de julio en Madrid, recordaban las tres jornadas gloriosas

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