Vocabulario de la revolución industrial

CRECIMIENTO ECONÓMICO


El logro más importante de la Revolución Industrial fue que originó por primera vez en la historia un crecimiento económico sostenido. Este crecimiento es el resultado de la acción conjunta de cuatro factores.
· El crecimiento económico requiere una mano de obra abundante y con alto grado de formación y especialización en el trabajo.
· El crecimiento económico necesita de una constante reinversión de capital. Una parte de la renta nacional debe, pues, ahorrarse y reinvertirse para asegurar una mayor capacidad de producción.
· La incorporación de nuevas tecnologías contribuye de modo decisivo al crecimiento económico porque eleva la productividad del trabajo. Nuevas máquinas, movidas primero con energía hidráulica y luego con vapor, revolucionaron la productividad de los obreros textiles desde el Siglo XVIII.
· El crecimiento económico requiere de instituciones que lo favorezcan. El Estado fomentó el crecimiento económico mediante inversiones de capital o promulgando leyes favorecedoras de las empresas capitalistas.
También las mentalidades y las costumbres deben de incluirse entre los factores del crecimiento, ya que pueden impedir o activar el crecimiento económico.

Resumen, causas y consecuencias

La revolución industrial fue un conjunto de transformaciones sociales y económicas que sucedieron en algunos países de Europa y que propiciaron la aparición del mundo contemporáneo.

Se puede definir como el conjunto de cambios en el proceso de producción que hicieron posible la desaparición del antiguo régimen económico y la implantación del capitalismo industrial.

El desarrollo basado en el trabajo manual se reemplazó por la industria y la manufactura, y trajo consigo una serie de beneficios y perjuicios. La industrial textil y el hierro fueron la punta de lanza de la revolución.

Estos cambios vinieron de la aplicación de la energía del vapor a la máquina, con lo que nacíó lo que conocemos como sociedad industrial.

Tuvo sus inicios en Inglaterra, a finales del Siglo XVIII, específicamente en la década de 1780, y se extiende hasta el año 1850, cuando prácticamente toda la industria inglesa termina adoptando máquinas de vapor.

Entre los principales inventos de este período se pueden mencionar la máquina de hilar hidráulica (Samuel Crompton, 1779), el telar mecánico (Edmund Cartwright, 1785), la máquina para recolectar algodón (Eli Whitney, 1793), el telégrafo óptico (Claude Chappe, 1793), la pila eléctrica (Alessandro Volta, 1800), el primer barco a vapor, el Clermont (Robert Fulton, 1807), la lámpara de arco eléctrico (Humphry Davy, 1808), la turbina de reacción (Claude Burdin, 1824), el primer tren de pasajeros (1825), la caldera tubular (Marc Seguin, 1827), el generador de corriente alterna (Hippolite Pixxi, 1832), la segadora (Cyrus McCormick, 1834), el primer motor eléctrico operativo (Moritz Hermann Jacobi, 1834), el telégrafo eléctrico (Samuel Morse, 1835/1843), la vulcanización del caucho (Charles Goodyear, 1839) y la desfibradora para obtener pasta de manera y producir papel (Friedrich Gottlieb Keller, 1841).

Las causas de la revolución industrial son producidas por diferentes factores:

– 
Agrario, aporta cuatro cosas importantes como lo son las estructuras agrícolas, los sistemas de cultivo y de explotación ganadera, los cambios en la ciencia y la técnica,  y los cambios en la mentalidad empresarial agraria.

– 
Demográfico, la caída de la mortalidad debido al incremento de la migración del campo a la ciudad, aunado con el crecimiento demográfico, proporcionaron mano de obra abundante y barata, e incrementaron el potencial mercado.

– 
Económico, la acumulación de capital,  del comercio colonial y el gran papel que jugaron la banca y la bolsa.

La revolución industrial generó una revolución comercial, haciendo que el comercio exterior creciera en un 420%, además que, gracias a la máquina de vapor y los nuevos materiales, hizo que se generalizara el uso del hierro forjado, del vidrio y del hormigón.

En cuanto a la industria textil, se pasa de la lana a una serie de estampados de algodón que venían de la India. Llegó la Mule Jenny en 1779 (máquina de hilar hidráulica), y el telar mecánico de Carthwright en 1785.

Las consecuencias de todo esto fueron:

– El nacimiento del capitalismo industrial de la mano de la fábrica.

– La aparición del sistema fabril que aporta la automatización del proceso productivo, la producción a gran escala y la división del trabajo.

– La sobreproducción, lo que en ocasiones generó periódicas crisis.

– Aumento del paro, debido a la menor necesidad de personal para lograr una mayor producción, lo que generó un descenso en los salarios, a tal punto que era necesario que todos los miembros de la familia trabajaran largas jornadas laborales de hasta 16 horas para poder subsistir.

– Se concentró la población en las ciudades, lo que aumentó el hacinamiento en viviendas muy pequeñas y con muy malas condiciones higiénicas.

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