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Con el pronunciamiento del Gral. Martínez Campos en Sagunto (1874), se iniciaba el periodo de la Restauración Borbónica tras la Primera república. El reinado de Alfonso XII (1875-85) buscaba la estabilidad frente a las convulsiones anteriores. El ideólogo fue el político conservador Antonio Cánovas del Castillo. La Restauración pasará por tres etapas: reinado de Alfonso XII, regencia de María Cristina y reinado de Alfonso XII. Para su desarrollo se redactó una la constitución de 1876, elemento base del sistema. Era un texto flexible y no partidista, y permitíó su extensa vigencia (1876-1923). Algunas de sus carácterísticas son:
1. Soberanía compartida entre el Rey y las Cortes.
2. La Corona es la clave del sistema. Puede vetar leyes y tiene competencias legislativas.
3. El poder ejecutivo (gobierno) lo ejerce la Corona través de los ministros, nombrados y cesados por el rey, quien también elige libremente al presidente del Gobierno.
4. Poder legislativo: corresponde a las Cortes y al Rey. La Corona puede vetar leyes y disolver las Cámaras. Sistema bicameral con Congreso y el Senado. Poder judicial independiente.
6. Una amplia declaración de derechos y libertades individuales
7. El reconocimiento del catolicismo como religión oficial del Estado.
8. Sufragio: se dejó sin definir. se aplicó el sufragio censitario hasta que en 1890, el Partido Liberal implantó el sufragio universal masculino.
9. Carácter centralista del sistema, ayuntamientos y diputaciones eran controlados por el el gobierno y las mismas leyes eran vigentes en todo el país.
El Bipartidismo estaba basado en la existencia de dos grandes partidos, el Partido Conservador (presidido por Cánovas del Castillo) y el Liberal (Sagasta), (llamados partidos dinásticos). Quedaban fuera los Carlistas, republicanos, nacionalistas y el socialismo. Los dos partidos del se alternaban en el poder, de ahí que se hablara del turnismo. El Rey era el encargado de nombar al presidente y convocar elecciones. El sistema funcionaba de forma pacífica. El turno en el poder lo pactaban entre los dirigentes y luego se producía el siguiente mecanismo electoral:
• El Rey nombraba un nuevo Jefe de Gobierno y disolvía las Cortes
E83.1
A los nacionalismos catalán y vasco respectivamente. En el Siglo XIX el nacionalismo se reavivó entre la burguésía, protagonista de la revolución industrial. En España los movimientos nacionalistas fueron un fenómeno importante durante la Restauración y surgieron como reacción al centralismo del sistema político. Surgieron nacionalismos donde perduraban elementos culturales propios, o se había producido un desarrollo económico diferenciado. La industrialización se concentra en Cataluña y País Vasco, hecho que atrae a numerosa población de otras regiones españolas, provocando una reacción defensiva en ciertos sectores, especialmente entre la burguésía.
2.
Con respecto a las similitudes podemos afirmar que ambos textos rechazan la política centralista del sistema canovista y los dos derivan de los regionalismos y muestran un carácter conservador. A fines del Siglo XIX, nacen movimientos que cuestionan la existencia de una única nacíón española en España. Vemos que el punto de partida de sus respectivos argumentos consiste en afirmar que Cataluña y el País Vasco son naciones y que, por tanto tienen derecho al autogobierno. Esta afirmación la basan en la existencia de unas realidades diferenciales: lengua, derechos históricos, cultura y costumbres propias. Estos movimientos tendrán planteamientos más o menos radicales: desde el autonomismo al separatismo.
Prat de la Riba es el ideólogo de un nacionalismo catalán autonomista,conservador, católico y burgués con dos objetivos: autonomía política para Cataluña dentro de España (lo afirma explícitamente en su texto) y defensa de los intereses económicos de los industriales catalanes con una política económica proteccionista. El nacionalismo catalán se extendíó esencialmente entre la burguésía y el campesinado; la clase obrera estuvo más cerca del anarquismo.
La defensa de los fueros vascos quedó ligada al Carlismo durante el Siglo XIX, así que cuando fueron derrotados se abolieron los fueros (1876). La burguésía vizcaína, enriquecida por la revolución industrial, fue el terreno en el que nacíó el nacionalismo vasco. Sabino Arana es el fundador del nacionalismo vasco que se caracteriza, como vemos en su texto, por su independentismo, radicalismo antiespañol, integrismo ultra católico, defensa del mundo rural y tradicional vasco,
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Durante la Restauración se produjo una expansión extraordinaria de la acción del movimiento obrero español por la industrialización y la consolidación del capitalismo y una mayor libertad. Con ello nacieron las asociaciones obreras, esto es sindicatos y partidos políticos.
El anarquismo fue la corriente mayoritaria en el movimiento obrero español. Sus principales focos estaban en Andalucía y Cataluña. Aunque existieron varias tendencias destacó la Federación de Trabajadores de la Regíón Española (FTRE) creada en 1881, el sindicato con mayor número de afiliados. Los principales rasgos ideológicos que definían a los anarquistas eran:
• Defensa de la revolución violenta con el objetivo de destruir el estado burgués, por ello fomentan huelgas y actos terroristas (asesinato de Cánovas del Castillo).Se generó un círculo vicioso: atentado, represión, atentado como represalia y represión que terminó con la FTRE. En 1911 se funda la Central Nacional de Trabajadores (CNT)
• Rechazo del juego político y de la participación en elecciones, consideradas un engaño.
• Rechazo de la autoridad y abolición del Estado (gobierno, ejército, policía, etc.)
• Supresión de la propiedad privada y defensa del colectivismo.
• Anticlericalismo, negación de la religión y de la Iglesia.
La corriente marxista o socialista se organizó en 1879 a en torno a Pablo Iglesias, seguidores de las ideas de Marx y Engels. En 1879 fundan el Partido Socialista Obrero Español (PSOE). Años después se funda el sindicato Uníón General de Trabajadores (UGT). PSOE y UGT fueron hasta inicios del Siglo XX minoritarios. Su presencia es importante en Madrid, País Vasco y Asturias. Consiguieron su primer escaño en 1910. Las ideas básicas del programa socialista eran:
• Transformación de la propiedad individual en propiedad social o de la sociedad entera.
• Posesión del poder político por la clase proletaria.
• Rechazo del terrorismo, como vía de lucha.
• El objetivo de los socialistas era la revolución y la toma del poder de forma por la clase proletaria. Pero hasta que llegara el momento era necesaria una larga fase de organización y propaganda, participando en política y las elecciones.
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A finales del Siglo XIX España sólo manténía Cuba, Puerto Rico y Filipinas de su Imperio colonial. La gran preocupación de los gobiernos españoles era mantenerlos pero a partir de 1868 comienzan las rebeliones independentistas en Cuba, que se extenderán a Filipinas y Puerto Rico sin que los gobiernos españoles, con más problemas en la península, encuentren una solución. En 1898 se produce una explosión provocada en el acorazado norteamericano Maine en el puerto de La Habana. El gobierno de EE.UU. Culpa a España, le declara la guerra y la derrota fácilmente. Ese año se firma la Paz de París por la que España, sin apoyo internacional, pierde sus últimas colonias en el Caribe y Pacífico. Las consecuencias del desastre del 98 serán muy amplias:
1.
Consecuencias económicas
La economía española se vio afectada menos de lo previsto, pues. Si bien se perdíó un mercado de ventas y unas materias primas baratas, la repatriación de capitales de los indianos sirvió para el desarrollo financiero e industrial. Además, ya no se debía costear un ejército y una administración en las colonias y promovíó una reforma de la Haciendal. También se implantan medidas proteccionistas.2.
Consecuencias políticas
Se generan fuertes críticas al sistema de la Restauración tanto desde la clase política gobernante (revisionismo político de Maura y Canalejas) como desde los intelectuales y otros sectores regeneracionistas que critican la corrupción y proponen programas basados en la reorganización política, la dignificación de la vida parlamentaria, la reforma educativa, la acción orientada a la ayuda social. Se refuerzan los nacionalismos catalanes (Lliga Regionalista) y vasco (PNV) y otros minoritarios. El ejército sale muy desprestigiado por la dureza de la derrota. Se sustituyó la presencia en ultramar con una mayor atención al norte de África, con consecuencias también importantes en el futuro.3.
Consecuencias sociales
Unos 60.000 soldados españoles murieron entre 1895 y 1898, muchos de ellos por enfermedades infecciosas, la mayoría de familias pobres, las que no podían pagar su exención del servicio militar y la guerra. El pesimismo se adueñó de la sociedad. España había perdido sus últimas colonias en un momento de revitalización del imperialismo europeo y el gobierno aparecía como el responsable, por ello se vio la necesidad de importantes cambios en las condiciones de vida y en su educaciónE94
En el XIX se inició en Cataluña la expansión de la industria moderna con el sector algodonero. Los primeros cambios se iniciaron a finales del Siglo XVIII, con la introducción de las nuevas máquinas de hilar inglesas y se consolidó al prohibirse en España la entrada de algodón hilado. Este impulso inicial se frenó por la Guerra de la Independencia (1808-1814) y se recuperó rápidamente con la llegada de la primera máquina de vapor y el impulso notable de la mecanización desde 1833. Su desarrollo está relacionado con el hecho de que fue un sector dedicado a producir para el mercado y no para el autoconsumo, a diferencia de la inmensa mayoría de las manufacturas existentes.
Sin embargo, la industria textil se vio limitada por: la escasez de carbón, lo que motivó la creación de colonias industriales en las cuencas de los ríos Ter y Llobregat para aprovechar la energía hidráulica (la hulla de importación para usar en máquinas de vapor resultaba cara) y la debilidad del mercado español, que hizo que los industriales textiles exigieran constantemente medidas proteccionistas, para hacer frente a la competencia de los tejidos extranjeros.
La siderurgia fue el otro sector del desarrollo de la industria moderna. Los primeros intentos de siderurgia en Málaga a comienzos de siglo fracasaron . Posteriormente los yacimientos de hulla de Asturias, convirtieron a esta regíón en centro siderúrgico de España. En el País Vasco, la industria siderúrgica se afianzó, gracias a la consolidación del eje comercial Bilbao-Cardiff, basado en la exportación de hierro a Gran Bretaña y la importación de carbón galés para los altos hornos vascos.
Debido a la falta de inversiones nacionales en la minería, estado tuvo que acudir a inversiones extranjeras, por lo que se aprobó en 1869 la Ley de Minas, que permitíó la liberalización del sector y la entrega de concesiones de explotación mineras a numerosas compañías extranjeras (belgas, ingleses y franceses) poniendo las minas españolas en manos extranjeras a cambio de grandes sumas de dinero. Yacimientos importantes fueron los de plomo en el Sur peninsular (Linares y La Carolina); los de cobre en Riotinto (Huelva) y los de zinc en Reocín (Cantabria).
Otras industrias de gran relevancia de este siglo fueron la Industria metalúrgica y la Industria química, que se desarrolló sobre todo para la agricultura, creando nuevos abonos, fertilizantes y pesticidas
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Nos encontramos ante un diagrama de barras que muestra el porcentaje de población activa en 1877 en Estados Unidos, Francia, Alemania, Holanda, Reino Unido y España por cada uno de los sectores económicos. En el sector secundario, los países con mayor porcentaje de población activa son: Reino Unido, Holanda y Alemania; y en el sector terciario: Reino Unido, Holanda y Estados Unidos. En el sector primario, los países con más peso son: España (con gran diferencia) y Estados Unidos.
Analizando las diferencias podemos decir que, en el Sector Primario, (barras diagonales), España es con diferencia el país con más población activa. Pese al fracaso general de las desamortizaciones sí aumentaron las roturaciones y la superficie cultivada. En cuanto al Sector Secundario (color blanco) España presenta tasas inferiores con respecto a los otros países. La situación geográfica española implicaba costes de transporte más elevados, para la adquisición de materias primas y las exportaciones. También por la escasez de recursos naturales y la falta de recursos hídricos en buena parte del territorio. En lo correspondiente al Sector Servicios (en negro) el poco peso se debíó al notable atraso de los transportes y la inexistencia de una red hidrográfica que permitiese el transporte fluvial. Por eso el ferrocarril se vio como la oportunidad para intentar impulsar la economía.
Todos estos datos, evidencian el inferior nivel de desarrollo industrial y económico de España que se encuentra en esos años bastante atrasada respecto a los demás países europeos. La invasión napoleónica, la guerra y el posterior gobierno de Fernando VII justifican el retraso del proceso de industrialización. España se refugió en un despotismo ilustrado anacrónico entre 1814 y 1833. Con la instauración del liberalismo se intentó promover la industrialización, pero de forma insuficiente. La conflictividad es causa de la elevada deuda pública y dificultó el desarrollo de una política industrial clara. Con la Restauración llegaron otros problemas como las políticas proteccionistas prolongadas o la corrupción generalizada.
Otras causas de este retraso industrial relacionadas con problemas estructurales de la economía: la dependencia de la inversión extranjera; la escasa demanda interna de producción industrial; la falta de inversión en el sector industrial; las malas comunicaciones terrestres debido a su geografía lo que incrementaba los costes del transporte;