Constitución del ferrocarril en el gobierno liberal

12.1. El reinado de Isabel II. Oposición al liberalismo: Carlismo y Guerra Civil. La cuestión foral

Durante el reinado de Isabel
II, se produce en España el cambio definitivo del Antiguo Régimen al Régimen liberal.
Al final del reinado de Fernando VII se plantea el problema sucesorio, pues el rey no tuvo hijos durante sus 3 primeros matrimonios, hasta 1829 cuando se casa con María Cristina de Nápoles y al año siguiente nace su hija Isabel. Los absolutistas más intransigentes (apostólicos) van a apoyar la candidatura de Carlos, hermano de Fernando, ya que la «Ley Sálica» impedía reinar a las mujeres hasta que Fernando la deroga con la «Pragmática Sanción», para que Isabel pueda reinar. En 1833 muere Fernando y comienza la primera Guerra Carlista, en la que se enfrentan María Cristina, Isabel y los liberales, contra Carlos y los carlistas (absolutistas).

El carlismo va a tener fuerza en las áreas rurales del País Vasco, Navarra, Cataluña y el Maestrazgo; con el apoyo de los campesinos (afectados por la venta de bienes comunales) y una parte de la nobleza y el clero; además van a ser ayudados por Austria, Prusia y Rusia [Santa Alianza].
Mientras los liberales tendrán fuerza en las ciudades y en la mitad sur peninsular; con el apoyo de la mayor parte del país, la burguésía, las clases urbanas y los intelectuales; además serán ayudados por Francia, Inglaterra y Portugal [a la izquierda]

En esta guerra se van a enfrentar 2 ideas contrapuestas [5 cada una]:
Los carlistas defiendes: los privilegios estamentales, los privilegios forales territoriales como los del País Vasco (jueces propios, menos impuestos, exención del servicio militar obligatorio), la monarquía absolutista, el ultracatolicismo y el intervencionismo en la economía (gremios); mientras los liberales defienden: la igualdad ante la ley, la igualdad territorial con un sistema centralista, la monarquía constitucional con soberanía nacional, quitar poder a la Iglesia mediante la desamortización eclesiástica y la libertad de propiedad y actividad económica (liberalismo económico).

Al morir Fernando VII estalla la guerra (1833-1840), que se divide en varias etapas:

  • 1º etapa. De 1833 a 1835: Al principio los carlistas controlaban el País Vasco, Navarra y Cataluña, excepto las ciudades. La guerra se va a extender por zonas de Aragón y Castilla.En 1835 muere Tomás de Zumalacárregui durante el asedio de Bilbao.
  • 2ª etapa. De 1835 a 1837: los carlistas van a lanzar varia expediciones militares atacando Madrid y Andalucía, aunque solo controlaban País Vasco y Navarra.
  • 3ª etapa. De 1837 a 1840: Ante la imposibilidad de ganar la guerra, van a surgir divisiones internas entre los carlistas. La mayor parte va a firmar el Convenio de Vergara en 1839, con sus líderes Espartero (liberal) y Maroto (carlista)
    , que tuvo ciertas concesiones para los carlistas, como mantener los fueros vascos y la incorporación al ejercito isabelino de los que quisieran. No obstante, un grupo de carlistas dirigido por Cabrera continuara la guerra en la zona del Maestrazgo, pero a los pocos meses serán derrotados, terminando la guerra con victoria liberal en 1840. Gracias a esto Espartero será nombrado Príncipe de Vergara.

Esta guerra tuvo varias consecuencias:

  • Demográficas: más de 300.000 muertos
  • Económica: Hubo muchos gastos que retrasaron la industrialización, lo que supuso la derrota económica de España, y que fueron pagados con el dinero de la desamortización de Mendizábal (1836).
  • Otras 2 Guerras Carlistas: La segunda entre 1646 y 1849, destaca el Conde de Montemolín, y fue una guerra de poca importancia que podemos definir como guerra de guerrillas. La tercera  entre 1872 y 1876, estallo con la expulsión de Isabel II de España.

La cuestión foral:


Los carlistas defendían los fueros del País Vasco y Navarra, así como recuperar los de Cataluña, Aragón, Valencia y Baleares, perdidos en el s. XVIII con los «Decretos de Nueva Planta», que consistían en ciertos privilegios como exenciones fiscales y militares o instituciones y leyes propias, lo que explica el gran apoyo popular que tuvo el carlismo en estas regiones.

Los liberales rechazaban los fueros y querían un estado centralista con las mismas leyes para todos. Sin embargo, al final de la primera Guerra Carlista, aceptaron los privilegios fiscales y las instituciones forales (Junas Generales Provinciales), para atraer a los carlistas moderados. En 1876, al terminar la ultima Guerra Carlista, se abolirán los fueros vascos y navarros, aunque en contrapartida se aprobaron los «Conciertos Económicos» para el País Vasco y Navarra.

12.2. Isabel II (1833-1843): Las regencias

Durante las regencias de María Cristina (1835-1840) y las de Espartero (1840-1843), se va a instaurar definitivamente en España el liberalismo. Van a surgir 2 grupos políticos: los moderados y los progresistas que coincidirán en: (1) la defensa de la monarquía parlamentaria y (2) una constitución, (3) la división de poderes y (4) el sufragio censitario (los electores son los que pagan una cantidad de dinero en concepto de contribución por la propiedad). Pero que diferirán en otras cosas, los moderados defienden: (1) el equilibrio entre revolución liberal y tradición, (2)un sufragio censitario muy restringido, (3) la importancia de la Corona como moderador, (4) el orden y la libertad, pero sobre todo el orden, (5) se oponen a la desamortización y quieren la confesionalidad del estado, (6) son la alta burguésía comercial, financiera e industrial y la nobleza, (7) destacamos a Martínez de la Rosa y Cea Bermúdez. Mientras los progresistas defienden: (1) una revolución liberal más profunda, (2) un sufragio censitario menos restrictivo, (3) menos importancia para la Corona, (4) un aumento de las libertades individuales, (5) las desamortizaciones y la libertad religiosa, (6) son las clases medias (burguésía urbana), (7) destacamos a Espartero y Mendizábal.

Regencia de María Cristina (1833-1840): Durante los primeros años, gobiernan los moderados Cea Bermúdez y Javier de Burgos (realiza una nueva división provincial en 1833, que se conserva en la actualidad). En 1834 se aprueba el «Estatuto Real», con Martínez de la Rosa como artífice, que es una «carta otorgada» que establece los mecanismos del Régimen Liberal y la sucesión de Isabel II. Trata de ser una transición del Antiguo Régimen al liberalismo y tiene un carácter muy conservador. Sus carácterísticas son:

  • Cortes bicamerales: Su cometido es pedir las leyes al rey, y está formado por el Estamento de los Próceres, designados por la Corona y el Estamento de los Procuradores, elegidos por sufragio muy restringido (menos del 1% de la población)
  • Monarquía: Tenia el poder ejecutivo y capacidad legislativa, además designa a los presidentes de los 2 estamentos.

Está concebido como una alianza entre el Antiguo Régimen y los moderados, de modo que los progresistas no lo aceptan y en Agosto de 1836 protagonizan el «pronunciamiento de los sargentos en la granja» en que alegan como problemas: (1) La Guerra Carlista, (2) una hacienda desastrosa [no hay pasta por la guerra] y la gran crispación social y política. Con esto los progresistas se hacen con el poder, restituyen la Constitución de 1812 y adoptan las siguientes medidas:

  • Desamortización eclesiástica de Mendizábal (1836): Tiene 3 objetivos: (1) sanear la economía con nuevos recursos, (2) ampliar el apoyo al liberalismo con nuevos propietarios y (3) quitar poder a la Iglesia. En este proceso primero se expropiaron y nacionalizaron las tierras, y luego se vendieron en subasta pública al mejor postor.
  • Constitución de 1837 (progresista y la 2ª en la historia de España): va a asentar el constitucionalismo definitivamente en España y destaca como artífice Agustín de Argüelles. Sus carácterísticas son:
  • Sistema de representación: Se basa en la soberanía nacional, con un sistema bicameral con el poder legislativo. Estará el Congreso, cuyos diputados serán elegidos mediante sufragio censitario y el Senado, formado por aquellos elegidos por el rey de entre los más votados de cada provincia con 40 años o más.
  • Monarquía: Tenia el poder ejecutivo y cierto poder legislativo. Además, se decreta la irresponsabilidad política del rey, que decae en sus ministros.
  • Administración local: los alcaldes son elegidos por sufragio.
  • Libertad de expresión y de imprenta
  • Religión: libertad de culto, aunque cercanía al catolicismo.

Satisfechos los progresistas con la Constitución de 1837, María Cristina va a llamar al poder a los moderados, con los que se siente mas cómoda. La situación política se va a deteriorar cuando en 1840 los moderador quisieron eliminar las elecciones en los ayuntamientos, de modo que los progresistas, dirigidos por Espartero, dirigen un pronunciamiento que obliga a María Cristina a partir al exilio, dando comienza a la regencia de Espartero (1840-1843).

El príncipe de Vergara se va a convertir en el nuevo regente, aupado por su fama en la victoria militar contra los carlistas. Va a gobernar de manera autoritaria, lo cual le va a granjear muchos enemigos. Su gobierno se caracteriza por: (1) Completar la desamortización eclesiástica (con las propiedades de la Iglesia en las ciudades) lo que le enfrenta con los moderados; (2) Bombardeo de Barcelona (1842), ya que Cataluña se sublevo por la política librecambista de Espartero; (3) Personalismo y favoritismo para sus amigos; (4) también parte de los progresistas van a estar descontentos con su autoritarismo.

Finalmente en Julio de 1843, Narváez (moderado)
, da un Golpe de Estado que obliga a Espartero a exiliarse a Londres. Ante la nueva situación se va a decidir adelantar la mayoría de edad de Isabel II a los 13 años, quien comenzara su reinado efectivo con Narváez como hombre fuerte.

12.3. Isabel II (1843-1868): el reinado efectivo

Isabel II va a ser proclamada reina con 13 años, en Noviembre de 1843. Su reinado va a durar 25 años, en los que casi siempre van a gobernar los moderados, menos de 1854 a 1856 que gobernaran los progresistas. Esto supone que la alta burguésía va a ser la protagonista de su reinado, en el cual se va a producir un despegue industrial y económico en España (sobre todo en el Cantábrico y en Cataluña). También van a surgir nuevos partidos como «La uníón liberal», que estaban a mitad de camino entre los moderados y los progresistas; y los «demócratas» y «republicanos», que se separaron de los progresistas y van a defender el sufragio universal.

Etapas de su reinado:

1ª etapa. Década moderada (1844-1854): [al empezar en Noviembre se considera que empieza en el 44] Ramón María Narváez, «El Espadón de Loja», va a ser el nuevo hombre fuerte y va a realizar una serie de reformas que buscan: un orden publico estricto y centralizar la administración para reforzar el control político. Para ello va a realizar las siguientes medidas:

  • Creación de la Guardia Civil: en 1844 para sustituir a la Milicia Nacional. Fue creada por el duque de Ahumada y es una organización militar con funciones civiles, para garantizar el orden y la propiedad [moderados son los ricos]
  • Centralización política: con (1) nuevas leyes para eliminar los fueros, como el Código Penal (1848) y el Cogido Civil (1851); (2) las 49 provincias se van a convertir en las unidades administrativas más importantes, sin vínculos entre sí, para eliminar los regionalismos (Galicia, País Vasco y Cataluña), dependiente directamente de Madrid.
  • Reforma fiscal de 1845: consiste en un nuevo sistema tributario en el que hay impuestos directos sobre la riqueza patrimonial (agrícola, industrial, comercial, etc.) y sobre la renta personal, e impuestos indirectos [IVA] sobre el consumo, sobre todo de alimentos básicos, lo que va a afectar a las clases populares.
  • Constitución de 1845: la tercera en la historia de España y de ideología moderada:
        • Soberanía compartida: entre el rey y las Cortes, es decir, no hay soberanía nacional
        • Sistema de representación bicameral: tiene el poder legislativo. En el Congreso de los diputados, estos son elegidos por sufragio censitario y en el Senado por designación real y con carácter vitalicio.  
        • Monarquía: tiene el poder ejecutivo y el derecho de vetar las leyes
        • Religión: España va a ser un Estado confesional católico.
        • Administración local: Los alcaldes van a ser designados por el rey
        • Ley electoral de 1846: establece que solo 1% de la población tenia derecho a voto y de elección.
  • Concordato con la Santa Sede: Tras la desamortización de Mendizábal en 1836, se habían deteriorado las relaciones Iglesia-Estado; este concordato supone una reconciliación  por diversos acuerdos, en los que el Papa va a reconocer el Régimen Liberal español y a cambio el Estado va a sostener económicamente a la Iglesia, que controla la enseñanza. Además, el Estado se va a convertir en confesional, a cambio de que la Iglesia renuncie a reclamar los bienes desamortizados.

Desde 1852 los gobiernos moderados se caracterizaban por una gran corrupción (enriquecimiento personal), lo cual unido a una gran crisis económica, va a provocar un nuevo pronunciamiento de los progresistas y moderados disidentes.

2ª etapa. Bienio progresista (1854-1856): Leopoldo O’Donnell era un moderado disidente que, junto a Francisco Serrano, se va a pronunciar en Vicálvaro contra el gobierno en el conocido como el  «Manifiesto del Manzanares», en el que piden: el fin del centralismo, la vuelta de la Milicia Nacional y el fin de la corrupción.

Las revueltas populares (también obreras), se van a extender por toda España, y los progresistas van desbordar el inicial Golpe de Estado moderado. Isabel II va a llamar a Espartero para que dirija un gobierno de coalición, cuya primera medida va a ser recuperar la Constitución de 1837, mientras se redactaba una nueva. Reformas del gobierno:

  1. Constitución de 1856: conocida como la «non nata», porque no llego a entrar en vigor. En ella va a haber un predominio del poder legislativo, típico de la ideología progresista [en las Constituciones siempre predomina un poder/ institución]
  2. Aumento de las libertades: de reuníón, imprenta, expresión, asociación, etc.
  3. Desamortización de Madoz (1855): será una desamortización civil, de bienes municipales, comunales y menos eclesiásticos, lo que supondrá la ruptura de relaciones con Roma.
  4. Plan de ferrocarriles de 1855: consiste en la creación de un sistema de ferrocarriles radial con centro en Madrid, financiado por la desamortización de Madoz [ por eso es en el mismo año]

El movimiento obrero va creciendo y se va organizando, de manera que surgen protestas y huelgas generales. La carencia de alimentos básicos, unida a las movilizaciones obreras, va a provocar revueltas en muchas ciudades, por ello O’Donnell propondrá una solución enérgica, a la cual Espartero se opondrá [le echaron por autoritario] y finalmente dimitirá. Ante esto Isabel II va a encargar el nuevo gobierno a O’Donnell, quien en Septiembre de 1856 disuelve las Cortes y recupera la Constitución de 1845 con pequeños cambios.

3ª etapa. La etapa de la Uníón Liberal (1856-1863): O’Donnell funda un nuevo partido, que estaba a medio camino entre los moderados y los progresistas, en el que va a destacar el joven Cánovas del Castillo (redactor del Manifiesto del Manzanares). El gobierno se caracteriza por:

  • Mantenimiento del orden público: para controlar las revueltas y motines.
  • Prosperidad económica: basada en la construcción del ferrocarril, la minería y el comercio.
  • Política exterior activa: se van a realizar varia expediciones militares en busca de prestigio. La primera de México y la segunda de la Conchinchina (Vietnam) fueron un fracaso, pero en la tercera en África (1860) se va a producir la conquista del territorio del Ifni y la ciudad de Tetuán, así como la victoria de la batalla de Castillejos, en la que destaca el general Prim. 

4ª etapa. Etapa final del reinado de Isabel II. Gobierno moderado y crisis(1863-1868): O’Donnell cae debido a las luchas internas dentro de su partido, de manera que Narváez y los moderados retoman el poder. Narváez va a dirigir una dura represión contra los revolucionarios (estudiantes, demócratas y progresistas), que ante la crisis económica de 1866 (crisis bursátil, hambre, carestía, enfermedades) demandan mejoras sociales y un aumento de la participación política de los ciudadanos (sufragio universal). La opinión publica se va aponer en contra de Narváez y en 1867 se mueren O’Donnell y Narváez por causas naturales.

La oposición se va organizando contra los moderados y contra Isabel II, que los apoya. Por esto, en 1866 van a firmar el pacto de Ostende, que es una conspiración anti-borbónica de progresistas, demócratas y la Uníón Liberal, [todos menos los moderados, los republicanos aun no] que protagonizan la Revolución de 1868, que derroca a Isabel II, poniendo fin a su reinado.

12.4. El sexenio democrático (1868-1874): intentos democratizadores. La Revolución, el reinado de Amadeo y la 1º República

En 1868 va a estallar una revolución, «La Gloriosa», que expulsa a Isabel II de España, dando comienzo a un periodo muy agitado, con ensayos de monarquía y república democrática.

La Revolución de 1868 ,resultado del pacto de Ostende (1866), dirigida por Juan Prim al que se une Serrano (jefe de la Uníón Liberal tras la muerte de O’Donnell), se va a iniciar con un manifiesto titulado «España con honra», en el cual piden: la expulsión de Isabel II y los borbones; un gobierno provisional, en el cual haya libertades de reunión, expresión, asociación, etc; creación de unas Cortes constituyentes [encargadas de hacer la Constitución] elegidas por sufragio universal masculino, que debe elegir entre república y monarquía.

Los partidarios de Isabel II, van a ser derrotados en la batalla de Alcolea (Córdoba), en Septiembre de 1868, quedando como vencedor Prim y provocando la huida de Isabel II a Francia. Además van a surgir en los municipios, Juntas Revolucionarias Locales, lo que la convirtió en una revolución de carácter popular.

En Junio se va a terminar la Constitución de 1869, que tiene como carácterísticas:

  1. Soberanía nacional
  2. Estado confesional: con libertad de culto
  3. Amplios derechos individuales: de expresión, reuníón, asociación, libertad de enseñanza, etc.
  4. Sufragio universal masculino: aunque solo de los mayores de 25 años.
  5.  Monarquía parlamentaria: El rey tiene irresponsabilidad política que va a recaer en sus ministros. El rey reina, pero no gobierna.

El siguiente paso va a ser encontrar un rey y mientras, Serrano será regente (1869-1871) y Prim, el jefe del Gobierno. Finalmente encuentran a Amadeo de Saboyá, hijo del rey de Italia, que era católico, demócrata y no Borbón.

Monarquía de Amadeo I (1872-1873)

Juan Prim es asesinado en Diciembre de 1870 con lo que Amadeo I pierde a su principal valedor y comienza a reinar con debilidad. Los problemas políticos y la inestabilidad van a ser muy grande: 

  • Ruptura del consenso entre progresistas, unionistas y demócratas. Tras la muerte del integrador Prim. Cada partido busca apoyos en el rey y este, al negarse y ser neutral, va a ser abandonado por todos.
  • Primera guerra de independencia cubana (1868-1878). Los cubanos tienen el apoyo de EEUU que intentaba controlar la zona. Termina con la Paz de Zanjón en 1878.
  • Tercera Guerra Carlista (1872-1876). Los carlistas se sublevan contra la España democrática a favor de Carlos VII. Controlaban zonas del País Vasco, Cataluña y Valencia.
  • Presión republicana.  Aliados muchas veces con el movimiento obrero que gracias a la libertad de asociación se va a organizar e incrementa la conflictividad social (huelgas, manifestaciones…)

Amadeo I ante la falta de apoyo popular y sin posibilidad de formar un gobierno fuerte, abdica en Febrero de 1873 y regresa a Italia

LA REPÚBLICA (1873-1874)

Tras abdicar Amadeo I, las Cortes españolas van a proclamar la República como solución de urgencia a pesar de ser poco los republicanos (“República sin republicanos”). El republicanismo tenía apoyos en parte del movimiento obrero, la burguésía y los intelectuales. La República se va a tener que enfrentar a grandes dificultades:

  1. División entre los republicanos: había 2 grupos: los federales, partidarios de una república federal; y los unitarios, partidarios de un república centralista.
  2. Guerras: va a haber 3: la 3ª Guerra Carlista, la Guerra de Independencia Cubana y la Guerra Cantonal.
  3. Oposición de los monárquicos: que se dividían en carlistas y alfonsinos, entre los que destaca Cánovas del Castillo.
  4. Grandes expectativas de las clases populares: de realizar una revolución social, que incluía: reparto de tierras entre los pobres, mejoras salariales, abolucion de las Quintas y de los Consumos [mili e «IVA»)
  5. Falta de apoyo internacional: solo fue reconocido por EEUU y Suiza

En menos de 1 año [1873] se van a suceder 4 presidentes del gobierno:

Figueras (Febrero-Junio): Va a convocar elecciones a Cortes constituyentes en las que vencerán los federalistas.

Pi I Margall (Junio-Julio): España se dividirá en 17 estados, por ser una república federal, se tendrá un plan de reparto de tierras entre los pobres y surgirá la Insurrección Cantonal, que pretendía organizar la República Federal desde los municipios, que se van a federar voluntariamente (consiste en hacer la revolución de abajo a arriba) como el cantón de Cartagena. Pi I Margall se opondrá y finalmente dimitirá.

Salmerón (Julio-Agosto): Para restablecer el orden y controlar las guerras Cantonal, Carlista y Cubana [CCC] ,se va a apoyar en el ejercito. Finalmente dimitirá por no querer firmar penas de muerte [amariconado, truca-salmón]

Castelar (Septiembre-Diciembre): Va a dar un giro conservador hacia la república unitaria, para lo que recorta libertades y da recursos al ejército para controlar la inestabilidad. El 3 de Enero de 1874, Manuel Pavía da un Golpe de Estado y disuelve las Cortes.

Durante 1874, se va a mantener la República, pero con un gobierno militar autoritario, presidido por Serrano. Los monárquicos, liderados por Cánovas, se van organizando y tomando fuerza, hasta que en Diciembre se inicie la restauración borbónica con Alfonso XII.

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