El refimen político de la restauración y sus fundamentos sociales

5) Explica qué es una sociedad de Clases

La Sociedad española de la Restauración se caracterizó por la agudización de los Contrastes sociales, al acentuarse aún más las desigualdades que separaban a Las clases altas del resto del país. La composición y carácterísticas de Estas últimas eran básicamente las mismas, y las clases populares continuaban empobrecidas Y marginadas de la vida política y social, tanto en la ciudad como en el campo. En este momento se van configurando las clases medias, cuyos empleos, forma de Vida y nivel económico comenzaban a marcarse con mayor claridad en este final De siglo.

La Sociedad de fin de siglo era ya una sociedad claramente estructurada, mucho más Definida y mucho más rígida que la de la primera mitad de la centuria.

Clases altas


Al iniciarse la Restauración la burguésía había perdido todo afán reformista, tal vez por los Propios excesos del Sexenio Revolucionario. En ella se fueron integrando los Ferreteros y banqueros vascos, los fabricantes catalanes, los cerealistas de la Meseta y los naranjeros levantinos, los propietarios de minas de la cornisa Cantábrica y de la zona de Cartagena… Ideológicamente era un grupo homogéneo: Derecha conservadora o ultraconservadora. Formaba una minoría exigua que Controlaba la mayor parte de la riqueza de la nacíón (cerca del 90 %). Se Mezcló y logró integrar en ella a la antigua nobleza y a los altos mandos Militares.

Clases medias


En la España de la Restauración sorprende la escasa importancia de las clases medias que, como Hemos indicado anteriormente, se van configurando a partir de este momento. La Integran profesionales liberales (abogados, profesores, médicos, comerciantes, Ingenieros y técnicos de empresas), empleados de la Administración, Propietarios y arrendatarios acomodados, pequeños rentistas… Ideológicamente Eran muy heterogéneos. Tenían mejor preparación cultural y empezaron a tomar Parte en la vida política y parlamentaria.

Clases populares


Estaban formadas por Campesinos, obreros industriales, artesanos, parados y todo un mundo de Población marginal, que vive en la miseria y que es muy difícil clasificar.

El campesinado Era aún en 1914 el 70 % de la población activa, cifra muy elevada si la Comparamos con la de otros países europeos. Sus ingresos fueron bajos, tanto en El caso de los pequeños propietarios como de los jornaleros. El caso de los Jornaleros era aún más grave porque, además de jornales insuficientes para Mantener la familia, podían pasarse largas temporadas en las que no tenían Trabajo. Sin embargo los conflictos sociales no fueron demasiados debido a los Largos siglos de sumisión y al caciquismo político.

Los obreros Tenían una mala situación laboral: abundaba el trabajo femenino e infantil, muy Mal retribuido; el horario laboral era de diez o doce horas, pero lo peor era El desinterés del Estado por la mejora de las condiciones laborales. Las Primeras reformas legales tuvieron lugar a partir de 1900, cuando ya hacía más De un cuarto de siglo que se habían establecido en el resto de Europa;
La Reducción del horario laboral a nueve horas diarias se produjo concretamente en 1914.

Las Condiciones de vida de las clases populares, basado tanto en datos estadísticos Sobre precios y salarios como en los informes médicos y sociológicos que se Hicieron en la época, coinciden en describir un cuadro desolador: barrios Caóticos, formados por barracas, viviendas o chabolas muy pequeñas, en las que Se hacinaban familias enteras, sin higiene, ni intimidad alguna ni servicios Urbanos (agua y luz). Con ingresos muy precarios, que apenas permitían una Dieta insuficiente y monótona, vivían con el fantasma permanente del paro, la Tuberculosis y otras enfermedades epidémicas, y sin ninguna asistencia social Ni recurso económico en caso de despido o de incapacidad laboral. Además el Trabajo de los niños hacía que no pudieran ir a la escuela. La delincuencia, la Mendicidad o el alcoholismo eran a menudo las alternativas a la falta de Trabajo, y eran unas plagas sociales que aumentaban conforme acudían nuevas Remesas de inmigrantes a unas ciudades cuya oferta de empleo crecía más Lentamente que la demanda.

7) Carácterísticas de La agricultura española

En Esta etapa hay un escaso desarrollo del sector agrario debido a la mala calidad De la mayor parte de las tierras de cultivo, a las adversas condiciones Climatológicas, a las atrasadas técnicas de cultivo utilizadas, y a la Exclusión del derecho a la propiedad de los más interesados, por el desigual Reparto de la tierra.

 Aunque en la etapa de Isabel II, en la 1ª Mitad del Siglo XIX, se hizo una reforma agraria liberal que permitíó que la Tierra fuera una mercancía que podía ser vendida y comprada libremente (abolición de los señoríos jurisdiccionales, desvinculación, desamortización de Las tierras de los Ayuntamientos y de la Iglesia…), la realidad es que el Grueso de los compradores fue una burguésía media más interesada en obtener rápidos Beneficios que en mejorar las condiciones de cultivo; por este motivo, siguió El tradicional atraso del campo español.  De todas maneras, la producción Agrícola aumentó y el comercio de productos agrícolas también. La Desamortización no cumplíó, pues, los objetivos de hacer una Reforma Agraria, y Tampoco condujo a la industrialización de España.

Prosigue, Por tanto, la desigual distribución de la tierra:

•En Extremadura, Castilla y Andalucía, predominan Los latifundios donde se realizan pocas inversiones, con una población que vive En condiciones de subsistencia y donde se desarrollará una gran conflictividad Y movilizaciones campesinas (anarcosindicalismo).

•La Submeseta Norte y Galicia, con zonas con Predominio de minifundios en los que destaca la mala calidad de las tierras y La emigración.

El principal cultivo será el cereal (el trigo sobre todo), que tendrá unos precios elevados, lo Que provocará la disminución del poder adquisitivo de la población para comprar Productos industriales. Otros cultivos son la vid en la Rioja y Cataluña, los olivos en Andalucía y los cítricos (la naranja) en la zona de Levante.

Las Técnicas agrícolas eran, a su vez, anticuadas. Se utilizaban mulos y el típico Arado romano, así como el tradicional barbecho, que permitía dejar de cultivar Durante un año parte de la tierra para mantener así su productividad. Pero poco A poco se fue introduciendo el arado de vertedera, se redujeron los barbechos, Se utilizaron abonos y se desarrollaron nuevos cultivos como la remolacha Azucarera, el arroz…



Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *