La crisis del sistema de la restauración (1898-1931)

BLOQUE 9 LA CRISIS DEL SISTEMA DE LA RESTAURACIÓN Y LA CAÍDA DE LA MONARQUÍA (1902-1931)
9.1 Alfonso XIII Y LA CRISIS DEL SISTEMA POLÍTICO DE LA RESTAURACIÓN: LOS PARTIDOS DINÁSTICOS. LAS FUERZAS 
POLÍTICAS DE OPOSICIÓN: REPUBLICANOS, NACIONALISTAS, SOCIALISTAS Y ANARCOSINDICALISTAS.
El 17 de Mayo de 1902 Alfonso XIII es proclamado rey. Rasgo de su reinado fue su protagonismo político, unido a la 
desaparición de Cánovas y Sagasta, la inestabilidad política y el protagonismo militar.
La primera etapa de su reinado estuvo marcada por el regeneracionismo, corriente ideológica que denunció el sistema 
político de la Restauración, y realizó propuestas para la modernización política, social y económica del país. Con 
destacados representantes como Joaquín Costa, censura el sistema político y falseamiento de la democracia, Ganivet y 
Unamuno. Hubo un regeneracionismo desde dentro del sistema de la Restauración o revisionismo (Maura, Canalejas),
y otro opuesto al sistema (socialistas, anarquistas, republicanos, carlistas y nacionalistas).
Los intentos de regeneración del sistema y su fracaso se produjeron de 1902-1914. Hay intentos de modernización 
promovidos por los partidos dinásticos del turno, Conservador y Liberal. Y del regeneracionismo partíó el revisionismo 
político, para dar un nuevo impulso a la política de la Restauración.
Silvela líderó el Partido Conservador tras el asesinato de Cánovas. En sus cortos gobiernos inició una política 
reformista, para ello creó los ministerios de Instrucción Pública y de Agricultura; Fdez. Villaverde reformó la Hacienda, y 
Eduardo Dato retomó la legislación social iniciada en la I República. 
Maura le sucedíó en 1903 y protagonizó el revisionismo conservador; presidente en el Gobierno corto (1903-1904) y 
en el Gobierno largo (1907-1909). La intención de Maura era realizar una “revolución desde arriba”, reformando lo 
estrictamente necesario y así mantener las bases fundamentales del sistema.
Su programa se basó: conservadurismo católico de masas, conectar la monarquía con la realidad social, incorporar
otras fuerzas políticas al sistema, y una política exterior nacionalista y de expansión en Marruecos para olvidar el 98. 
Proyectó la Ley de Bases de la Administración Local, para formar mancomunidades; fundó el INP, aprobó la Ley de 
Huelga y Reforma Electoral (oficialmente para eliminar el fraude, pero quería frenar el voto socialista y republicano)
.
En Julio de 1909 estalló en Barcelona la Semana Trágica, en ella confluyeron varios problemas: el catalanismo político
(Ley de Jurisdicciones 1906, Solidaritat Catalana), los republicanos (Partido Republicano Radical), y el movimiento 
obrero (Solidaridad Obrera). Los sucesos se iniciaron cuando el Gobierno de Maura reclutó reservistas con destino a 
Marruecos. Las organizaciones obreras convocaron una huelga general de protesta en Barcelona, que degeneró en un 
motín que duró una semana. Se construyeron barricadas, hubo actos de proclamación de la República, quema de 
edificios religiosos y numerosas detenciones.



 La dura represión con ejecuciones (Ferrer i Guardia) acarreó críticas 
internacionales y una campaña de desprestigio (republicanos, socialistas y liberales) provocando la dimisión de Maura.
El revisionismo liberal lo protagonizó José Canalejas (1910-1912), en su programa admitía la intervención del Estado
en la economía y la sociedad, separación Iglesia-Estado (Ley del Candado 1910), incrementó la protección legal a los 
trabajadores, aprobó la Ley de Reclutamiento (1912) que establecía el servicio militar obligatorio en época de guerras, 
sin exenciones; y democratización del régimen. En 1912 fue asesinado por un anarquista.
La crisis del sistema de la Restauración vino con la muerte de Canalejas. Los dos partidos sufrían una fuerte crisis de 
liderazgo y de relación entre ellos, al tiempo crecía la oposición de republicanos, socialistas y nacionalistas. Comenzaba 
así un enfrentamiento real entre los dos partidos, y la alternancia a partir de ahora se producía por mandato real.
Al margen de los partidos dinásticos, las fuerzas políticas de oposición se fueron reforzando, estas eran:
-El republicanismo principal fuerza de oposición pero fragmentada en diversos grupos, defendían el progreso y la 
justicia social. En el reinado de Alfonso XIII surgen dos nuevos partidos: Partido Radical fundado (1908) por Lerroux, 
anticatalanista, anticlerical y revolucionario; y el Partido Reformista (1912) fundado por Melquiades Álvarez, más 
moderado que llegaba a admitir la monarquía democrática y social.
-Los nacionalismos. El más implantado era el catalán, y el partido más arraigado la Lliga Regionalista, conservadora y 
que gobernó de 1914 a 1923. En 1906 nace Solidaritat Catalana, agrupación interclasista para defender los derechos de 
Cataluña. En 1917 nace Partit Republicá Catalá, y 1922 Acció Catalá y Estat Catalá dirigida por Maciá. El republicanismo 
sería derrotado por la Lliga hasta su uníón en un solo partido en 1931, Esquerra Republicana de Catalunya.
El nacionalismo vasco seguía teniendo su principal expresión en el PNV, apoyado en la burguésía bilbaína, 
ultraconservadora y recelosa del progreso e industrialización. Creó su propio sindicato Solidaridad de Obreros Vascos.
También crecíó el nacionalismo gallego (Solidaridad Gallega), junto al regionalismo valenciano y andaluz.
-Los socialistas. En su rama política (PSOE) y sindical (UGT) continuaban su lento crecimiento, principalmente en 
Madrid, País Vasco y Asturias. Sin renunciar a la revolución social, cada vez participaban más en la vida parlamentaria, 
así en 1910 Pablo Iglesias se convirtió en el primer socialista en acceder a las Cortes.
– Los anarcosindicalistas. En 1910 nace la Confederación Nacional de Trabajadores (CNT) que llegó a ser el sindicato 
mayor de España, con gran crecimiento tras la Primera Guerra Mundial (de 15 000 a 700 000 afiliados). Se definía como 
revolucionaria y defendía la huelga y el boicot hasta proceder a la huelga general revolucionaria.


BLOQUE 9 LA CRISIS DEL SISTEMA DE LA RESTAURACIÓN Y LA CAÍDA DE LA MONARQUÍA (1902-1931)
9.1 Alfonso XIII Y LA CRISIS DEL SISTEMA POLÍTICO DE LA RESTAURACIÓN: LOS PARTIDOS DINÁSTICOS. LAS FUERZAS 
POLÍTICAS DE OPOSICIÓN: REPUBLICANOS, NACIONALISTAS, SOCIALISTAS Y ANARCOSINDICALISTAS.
El 17 de Mayo de 1902 Alfonso XIII es proclamado rey. Rasgo de su reinado fue su protagonismo político, unido a la 
desaparición de Cánovas y Sagasta, la inestabilidad política y el protagonismo militar.
La primera etapa de su reinado estuvo marcada por el regeneracionismo, corriente ideológica que denunció el sistema 
político de la Restauración, y realizó propuestas para la modernización política, social y económica del país. Con 
destacados representantes como Joaquín Costa, censura el sistema político y falseamiento de la democracia, Ganivet y 
Unamuno. Hubo un regeneracionismo desde dentro del sistema de la Restauración o revisionismo (Maura, Canalejas),
y otro opuesto al sistema (socialistas, anarquistas, republicanos, carlistas y nacionalistas).
Los intentos de regeneración del sistema y su fracaso se produjeron de 1902-1914. Hay intentos de modernización 
promovidos por los partidos dinásticos del turno, Conservador y Liberal. Y del regeneracionismo partíó el revisionismo 
político, para dar un nuevo impulso a la política de la Restauración.
Silvela líderó el Partido Conservador tras el asesinato de Cánovas. En sus cortos gobiernos inició una política 
reformista, para ello creó los ministerios de Instrucción Pública y de Agricultura; Fdez. Villaverde reformó la Hacienda, y 
Eduardo Dato retomó la legislación social iniciada en la I República. 
Maura le sucedíó en 1903 y protagonizó el revisionismo conservador; presidente en el Gobierno corto (1903-1904) y 
en el Gobierno largo (1907-1909). La intención de Maura era realizar una “revolución desde arriba”, reformando lo 
estrictamente necesario y así mantener las bases fundamentales del sistema.
Su programa se basó: conservadurismo católico de masas, conectar la monarquía con la realidad social, incorporar
otras fuerzas políticas al sistema, y una política exterior nacionalista y de expansión en Marruecos para olvidar el 98. 
Proyectó la Ley de Bases de la Administración Local, para formar mancomunidades; fundó el INP, aprobó la Ley de 
Huelga y Reforma Electoral (oficialmente para eliminar el fraude, pero quería frenar el voto socialista y republicano).
En Julio de 1909 estalló en Barcelona la Semana Trágica, en ella confluyeron varios problemas: el catalanismo político
(Ley de Jurisdicciones 1906, Solidaritat Catalana), los republicanos (Partido Republicano Radical), y el movimiento 
obrero (Solidaridad Obrera). Los sucesos se iniciaron cuando el Gobierno de Maura reclutó reservistas con destino a 
Marruecos. Las organizaciones obreras convocaron una huelga general de protesta en Barcelona, que degeneró en un 
motín que duró una semana. Se construyeron barricadas, hubo actos de proclamación de la República, quema de 
edificios religiosos y numerosas detenciones.



 La dura represión con ejecuciones (Ferrer i Guardia) acarreó críticas 
internacionales y una campaña de desprestigio (republicanos, socialistas y liberales) provocando la dimisión de Maura.
El revisionismo liberal lo protagonizó José Canalejas (1910-1912), en su programa admitía la intervención del Estado
en la economía y la sociedad, separación Iglesia-Estado (Ley del Candado 1910), incrementó la protección legal a los 
trabajadores, aprobó la Ley de Reclutamiento (1912) que establecía el servicio militar obligatorio en época de guerras, 
sin exenciones; y democratización del régimen. En 1912 fue asesinado por un anarquista.
La crisis del sistema de la Restauración vino con la muerte de Canalejas. Los dos partidos sufrían una fuerte crisis de 
liderazgo y de relación entre ellos, al tiempo crecía la oposición de republicanos, socialistas y nacionalistas. Comenzaba 
así un enfrentamiento real entre los dos partidos, y la alternancia a partir de ahora se producía por mandato real.
Al margen de los partidos dinásticos, las fuerzas políticas de oposición se fueron reforzando, estas eran:
-El republicanismo principal fuerza de oposición pero fragmentada en diversos grupos, defendían el progreso y la 
justicia social. En el reinado de Alfonso XIII surgen dos nuevos partidos: Partido Radical fundado (1908) por Lerroux, 
anticatalanista, anticlerical y revolucionario; y el Partido Reformista (1912) fundado por Melquiades Álvarez, más 
moderado que llegaba a admitir la monarquía democrática y social.
-Los nacionalismos. El más implantado era el catalán, y el partido más arraigado la Lliga Regionalista, conservadora y 
que gobernó de 1914 a 1923. En 1906 nace Solidaritat Catalana, agrupación interclasista para defender los derechos de 
Cataluña. En 1917 nace Partit Republicá Catalá, y 1922 Acció Catalá y Estat Catalá dirigida por Maciá. El republicanismo 
sería derrotado por la Lliga hasta su uníón en un solo partido en 1931, Esquerra Republicana de Catalunya.
El nacionalismo vasco seguía teniendo su principal expresión en el PNV, apoyado en la burguésía bilbaína, 
ultraconservadora y recelosa del progreso e industrialización. Creó su propio sindicato Solidaridad de Obreros Vascos.
También crecíó el nacionalismo gallego (Solidaridad Gallega), junto al regionalismo valenciano y andaluz.
-Los socialistas. En su rama política (PSOE) y sindical (UGT) continuaban su lento crecimiento, principalmente en 
Madrid, País Vasco y Asturias. Sin renunciar a la revolución social, cada vez participaban más en la vida parlamentaria, 
así en 1910 Pablo Iglesias se convirtió en el primer socialista en acceder a las Cortes.
– Los anarcosindicalistas. En 1910 nace la Confederación Nacional de Trabajadores (CNT) que llegó a ser el sindicato 
mayor de España, con gran crecimiento tras la Primera Guerra Mundial (de 15 000 a 700 000 afiliados). Se definía como 
revolucionaria y defendía la huelga y el boicot hasta proceder a la huelga general revolucionaria.

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