El conde Lucanor trabajo

8.4.- Economía y sociedad en la España del Siglo XVI

En ese siglo, había 8 millones de personas en España, incluido Portugal, siendo la zona más poblada Castilla. Economía de base agraria, atrasada, y cuyo aumento de la productividad se producía por aumento de roturaciones. Continúa la Mesta pese a restar tierras de cultivos y vender barata la materia prima al extranjero. No se creó una industria nacional lanera por falta de inversión y reticencias señoriales sobre el trabajo manual (quejas de los arbitristas). Artesanos organizados en gremios cuya producción apenas atendía a la demanda local frente a la competencia extranjera. La atrasada red de caminos no favorecía el comercio. El comercio americano se rige por el monopolio y solo Cádiz comercia con América. Esta centralización se mantuvo hasta el Siglo XVIII. La llegada de metal precioso americano provocó inflación  porque a una demanda constante, el precio del producto está determinado por la cantidad de dinero disponible; por tanto, cuando hay más dinero, aumentan los precios. Aunque el metal se dirigía a pagar préstamos adquiridos por la Corona, afectó a la economía lo mismo que la demanda en aumento que no fue satisfecha por una oferta adecuada y que tendía al alza de los precios. Esta situación se mantuvo hasta el Siglo XVII. Juros y asientos fueron los sistemas de financiación de los gastos reales. La sociedad es estamental e inamovible: el estamento privilegiado mantuvo exenciones fiscales y otros privilegios mientras que el estamento no privilegiado (burguésía y campesinado) mantuvo muchas obligaciones y pocos derechos.

8.5.- Cultura y mentalidades en la España del Siglo XVI: La Inquisición

En este siglo aún pervive el Renacimiento por el que renace la cultura clásica acorde con los nuevos tiempos. Se desarrolla el antropocentrismo frente al teocentrismo medieval. La corriente intelectual que se genera dentro del Renacimiento fue el Humanismo con pensadores de la talla de Luís Vives, el Cardenal Cisneros (Univ. De Alcalá de Henares), Nebrija, Servet. En literatura, el Siglo de Oro desarrollo poesía, teatro y novela picaresca que adquirieron fama universal desde Garcilaso de la Vega pasando por Teresa de Jesús, San Juan de la Cruz, Fray Luis de León, Cervantes y el anónimo Lazarillo de Tormes. En arte destaca la pureza en las formas siendo el más representativo el Monasterio de El Escorial de Juan Bautista de Toledo y Juan de Herrera y en pintura, El Greco. Hubo un intenso renacer religioso con el Concilio de Trento (1545- 1563) del que surgieron los jesuitas. La Inquisición seguía vigente desde reinado de RR.CC, persiguiendo a los herejes y utilizando los autos de fe. Dependía de la Corona y estaba administrada por un Inquisidor General. Persiguieron a los iluminados, erasmistas, protestantes y escritores, ya que también censuraban libros. Felipe II, temiendo el contagio de ideas no católicas, prohibíó salir a estudiar a Europa e impidió la llegada de intelectuales europeos cerrando las fronteras peninsulares al conocimiento.

9.1.- Los Austrias del Siglo XVII. Gobiernos de validos y conflictos internos

Los reyes fueron Felipe III, Felipe IV y Carlos II, se siguió el sistema de monarquía hereditaria con predominio de la línea masculina. A diferencia del gobierno personal de los reyes del XVI, con estos reyes hubo validos o privados: eran nobles que con la confianza del rey gobiernan en su nombre. Esto relajaba al rey pero reforzaba su autoridad ya que las decisiones no pasaban por los Consejos, las tomaba directamente el valido. Con Felipe III estuvo el Duque de Lerma, valido atento a sus intereses personales, fueron expulsados los moriscos (1609), prometido desde 1568, generando vacío demográfico y daño a la producción agraria. Problemas de Hacienda hizo que acuñaran moneda de vellón. Con Felipe IV y su valido El Conde Duque de Olivares, se intentó un programa de centralización  y superioridad del rey sobre los reinos con la Uníón de Armas (1626) que fracasó, derrotaron a los catalanes en  la guerra del segadors (1640 – 1652), vencieron los intentos secesionistas de Aragón y Andalucía y en 1668, por el tratado de Lisboa, reconocieron la independencia de Portugal (unida a España desde 1580). Con Carlos II, la regencia mantuvo valimientos pese a las prohibiciones del testamento de Felipe IV mientras que en la mayoría de edad hubo “primer ministro” (Juan José de Austria, Medinacelli, Oropesa) Hubo un programa de recuperación económica coherente, acuñación de moneda de vellón, devaluación monetaria y la creación de la Superintendencia de Hacienda. Al morir sin hijos dejó como heredero de España e Indias al francés Felipe de Anjou, emparentado con los Austrias, pero que traía la dinastía Borbón con el nombre de Felipe V.


9.2.- La crisis de 1640

Crisis política en el reinado de Felipe IV y valimiento del Conde Duque de Olivares  generada por la  Uníón de Armas (1626) para reforzar la autoridad del rey sobre los reinos (centralización) y  por los gastos de la guerra de los 30 años. Estalló en Cataluña que rechazaba tal política y contribuir a los gastos militares de dicha guerra. Estalló con el Corpus de Sangre (Junio 1640) y dio origen a  la guerra del segadors (1640-1652). Frente a la Corona, los catalanes tuvieron ayuda francesa, Pau Clarís logró la escisión de España y se declararon república independiente bajo protección francesa durante 12 años. Cuando Felipe IV vió el descontento catalán por las intenciones francesas de anexión (Luis XIII logró el título de Conde de Barcelona), envió un ejército dirigido por Juan José de Austria y derrotó al ejército francocatalán. Confirmó los fueros y por el tratado de los Pirineos (1659) firmábamos la paz con Francia y les dábamos el Rosellón, Cerdaña y Artois. También en 1640, Portugal inició su proceso se separación rechazando la política centralista de Olivares que fue lograda en el tratado de Lisboa de 1668. Andalucía y Aragón tuvieron movimientos secesionistas dirigidos por nobleza que no veían beneficio en mantener uníón con Castilla. Todas fracasaron pero se  mostró una crisis interna y la necesidad de algún tipo de reforma que no llegó en este siglo.

9.3.- La España del Siglo XVII: el ocaso del Imperio español en Europa

Felipe III  mantuvo la paz con Inglaterra (1604) y con Holanda (Tregua de los 12 años) evitando gastos militares y desarrollando la diplomacia. Pese a las reticencias del Dq. De Lerma, entramos en la Guerra de los Treinta Años (1618–1648) iniciada por temas religiosos entre Alemania y Austria y que terminó siendo una lucha por la hegemonía europea entre potencias. Por defender a Austria entramos en el conflicto que se extendíó al reinado de Felipe IV. Éxito diplomático en Valtelina y militares en Breda, en Nördlingen frente a los suecos y Fuenterrabía frente a Francia. Las derrotas de la flota española (Dunas y Matanzas) afectaron al ejército de Flandes y a la comunicación con América. En 1643, Francia nos derrotó en Rocroi generando crisis militar y la caída de Olivares. En 1648 se firma la Paz de Westfalia por la que España pierde su hegemonía en Europa. Por el Tratado de Munster (1648)
reconocemos la independencia de los Países Bajos (Holanda) y por la Paz de los Pirineos (1659)
logramos la paz con Francia (en guerra desde 1643 a 1659) entregándoles Artois, Rosellón y Cerdaña y concesiones comerciales en América. En 1640 se rompe la unidad ibérica con el inicio de la independencia portuguesa reconocida en el Tratado de Lisboa (1668). Con Carlos II hubo guerras con Francia desde 1667 a 1687 perdiendo parte de Flandes, Franco Condado, Luxemburgo cambiando su actitud al no haber heredero al trono español. Mantuvimos América pero quedaban pocos territorios españoles en Europa , no obstante, se hizo un gran esfuerzo por mantener costas y fronteras protegidas

9.4.-La España del Siglo XVII: evolución económica y social

Desde el Siglo XVI se arrastraba una crisis que afectaba a finanzas, producción y comercio. Hubo desequilibrio regional con crecimiento de Madrid (capital del Reino) y centros mercantiles de la periferia cantábrica y levantina debido a cultivos dedicados a la industria textil (morera, lino, cáñamo) y otros dirigidos al comercio, no a subsistencia. La crisis demográfica provocada por la expulsión de moriscos en 1609 (+ de 200.000 personas) redujo producción  y  rentas al quedar la tierra sin cultivar. Frente a la crisis textil castellana crecíó la catalana; no obstante, nuestro mercado no estaba protegido como el europeo y el producto extranjero seguía siendo competitivo en calidad y precio. Las medidas de recuperación económica llegaron con Carlos II y los ministros Medinacelli mediante devaluación monetaria, protección de la industria textil y atención al comercio americano, siguieron con Oropesa con reforma en Hacienda, proyecto de única contribución,  reducción de deuda pública,  creación del cargo de Superintendente de Hacienda. Sin olvidar los proyectos anteriores de Juan José de Austria (1675). De América se sigue sacando metal precioso pero hubo reducción de envíos para afrontar gastos de administración y defensa allí. La autosuficiencia creciente redujo el tráfico de mercancías con España afectando a los ingresos peninsulares (ventas e impuestos). El régimen demográfico es antiguo y se percibe retraso en edad del matrimonio por carecer de medios económicos. Se mantiene la sociedad estamental basada en el privilegio. Aumenta el número de pobres y las rebeliones (bandolerismo) debido a la presión fiscal e inflación.


9.5.- La España del Siglo XVII: esplendor cultural. El Siglo de Oro

Desde 1580 a 1640 se desarrolló el Siglo de Oro de las letras hispanas en contraste con una etapa de decadencia económica. Pese al estancamiento científico por el decreto de Felipe II de prohibición de salida y entrada de intelectuales, el control del saber por clero e Inquisición (censura) una minoría siguió abierta a la novedad: los novatores de las universidades de la Corona de Aragón. Eran continuadores de los arbitristas y conscientes del atraso científico español y del anquilosamiento de las universidades por lo que sacaron el saber a tertulias y academias. En literatura Lope de Vega, Calderón, Tirso, Góngora, Quevedo, Cervantes utilizaron sus textos para criticar o analizar sociedad y política. Los corrales de comedias se extendieron y la cultura se acercó al pueblo. En arte, es la etapa del Barroco muy utilizado por la Iglesia para fomentar sus principios y evitar el aumento de herejías. Es un estilo al servicio de la Iglesia y de la monarquía pues exaltaba su poder. Entre los artistas, Velázquez  abarcó todos los temas desde la agilidad de su pincel y retratando lo físico y psicológico de cada personaje. La escultura religiosa expresiva de Gregorio Fernández y Alonso Cano. En arquitectura, la ornamentación de fachadas se centra en las puertas y el uso de materiales pobres denota la crisis del XVII. Destacan Churriguera, Casas Novoa, Gómez de Mora.

10.1.- La España del Siglo XVIII: la guerra de Sucesión y el sistema de Utrecht

Por testamento de Carlos II, llegaba al trono español Felipe de Anjou y la dinastía Borbón en Noviembre de 1700. La reacción del archiduque Carlos de Austria contra tal decisión provocó la guerra de Sucesión (1701 – 1713) en el que Austria, Holanda, Inglaterra, Dinamarca, Portugal, Prusia y Saboyá unidos en la Gran Alianza de La Haya se enfrentan a Felipe V que solo tiene ayuda francesa. Al tiempo, estalló un conflicto civil en el que Castilla apoya al Borbón y la Cª de Aragón al Austria (1705-1714). Pese a la victoria de Almansa (1707) será en 1711 cuando la guerra sea favorable a Felipe V al convertirse Carlos en emperador de Austria. El temor de la Gran Alianza a un exceso de poder austriaco lleva a finalizar la guerra y al tratado de Utrecht (1713) por el que Felipe V es reconocido rey de España e Indias, Austria recibe el Milanesado, Flandes, Nápoles y Cerdeña, Saboyá recibe Sicilia, Holanda recibe Bélgica e Inglaterra logra Gibraltar, Menorca, Terranova, territorios en bahía de Hudson, navío de permiso y tratado de asiento de negros. De esta manera,  Inglaterra se convirtió en nueva potencia europea y España perdíó los últimos territorios europeos dedicándose a vigilar con cautela sus territorios americanos.

10.2.- La España del Siglo XVIII: cambio dinástico. Los primeros Borbones

La nueva dinastía llegó en Noviembre de 1700 por el testamento de Carlos II, último Austria, que moría sin descendencia. Eligió a Felipe de Anjou, nieto de Luis XIV y emparentado con los Austrias. Su reinado se inició con la guerra de Sucesión (1701-1713) provocada por el archiduque Carlos de Austria y la Gran Alianza de La Haya. El tratado de Utrecht (1713) le reconocía como rey de España e Indias y perdía territorios europeos. Como respuesta a la reacción proaustriaca de la Cª de Aragón desde 1705 a 1714 dentro de dicha guerra, Felipe V les aplicó la  castellanización y centralización con los Decretos de Nueva Planta  surgiendo una España unida desde lo político y jurídico. Durante su reinado se conseguirán territorios italianos en manos de Austria desde Utrecht haciendo uso de los Pactos de Familia con Francia (1734 y 1743) y se inicia el catastro en Cataluña con Patíño. Largo reinado con una breve abdicación en 1724 para lograr trono francés, dejando como rey a su hijo Luis I.
Al morir éste a los pocos meses, Felipe V vuelve al trono hasta 1746.
Le sucede Fernando VI (1746-1759)
cuyo reinado destacó la neutralidad y la disuasión para evitar conflictos mientras se organizaba una armada. Con su secretario, Ensenada se plantea una única contribución en Castilla, se firma Concordato con Santa Sede por el que se inicia el regalismo borbónico, compramos a Inglaterra el asiento de negros e intercambiamos territorios en Brasil con Portugal. El rey enloquece pero la administración está tan bien trazada que la ausencia del rey apenas se notaba. El sistema político del Siglo XVIII fue monarquía absoluta y administración de modelo francés (pocos cargos y más eficaces).


10.3.- La España del Siglo XVIII: reformas en la organización del Estado. La monarquía centralista

Se establecíó una monarquía absoluta y administración de modelo francés (pocos cargos y más eficaces). Con Felipe V se aplica castellanización y centralización con los Decretos de Nueva Planta en Cª de Aragón (1707 a 1716)
  surgiendo una España unida desde lo político y jurídico. Navarros y vascos mantuvieron fueros como premio a su fidelidad a Felipe V. En 1714 se aplican los Decretos de Nueva Planta de la Administración por el que se crean 5 secretarias para asuntos de gobierno cuyo secretario es nombrado por el rey; todos se reunían en gabinete con el rey para estar al tanto de los problemas y reformas. Solo quedaron las Cortes de Castilla y legislaba el rey, solo quedó el Consejo de Castilla con facultades en política interior y tribunal supremo. A nivel municipal, el corregidor era militar,  nombrado por el rey y le ayudaba el regidor vitalicio en el gobierno local (elegido de entre los poderosos de la ciudad

). Otras  novedades

El  territorio se organizó en provincias e intendencias,  los virreyes en la Cª de Aragón fueron sustituidos por capitanes generales con función militar y de gobierno, llegó el intendente (origen francés) con competencias fiscales, económicas, inspección. Las audiencias siguieron implantando justicia y asesoraban en materia legal al capitán general. En materia fiscal se crea una contribución única que establecía centralización impositiva y de recaudación: comenzó con Felipe V (Patíño) y siguió con Fernando VI (Ensenada). Vascos y navarros mantuvieron autonomía fiscal y no se logró la unificación de monedas entre reinos. Uso obligatorio del castellano en la administración.


10.4.- La práctica del despotismo ilustrado: Carlos III

Bajo el lema “todo para el pueblo pero sin el pueblo” se unían ideas absolutistas con algunas de la Ilustración para lograr mayor eficacia en el Estado, en beneficio de éste y de sus súbditos. Así lo aplica el rey durante su reinado (1759-1788) con centralización de la administración, unificación legislativa, modernización de la economía, fomento de la instrucción pública y la investigación y aplicación del regalismo. Anima a la inversión continuando con las manufacturas reales, potencia la explotación de Sierra Morena con nuevas poblaciones, reforma Madrid. Se enfrenta al motín contra Esquilache (1766) aceptando las reformas solicitadas por el pueblo pero aplicando algunas de ellas cuando lo consideró conveniente. Como resultado expulsó a los jesuitas (1767) aplicando una política regalista (imposición de la autoridad del rey en asuntos eclesiásticos) que siguió utilizando para frenar a la Inquisición, liberalizar propiedades en manos muertas, creó el Tribunal de la Rota. Introdujo bandera e himno, reorganizó el ejército bajo modelo prusiano y creó la Junta Suprema de Estado que fue antecedente del actual Consejo de Ministros.

10.5.- La España del Siglo XVIII: Evolución de la política exterior en Europa

Los tratados de Westfalia (1648) y Utrecht (1713) habían convertido a España en una potencia de 2º orden pero consciente de su posición.

Felipe V (1700-1746)

recuperó los territorios italianos en manos de Austria utilizando los Pactos de Familia con Francia (1734 y 1743) incorporando Nápoles, Sicilia, Parma, Módena y Toscana. En 1725, el emperador de Austria le reconoce como rey. Frente a los ingleses resultan fallidos los intentos de recuperar Gibraltar pero, fue un éxito la Guerra de la Oreja de Jenkins (1739-1748) en defensa de las colonias americanas. Con Fernando VI (1746-1759)
se vivíó una etapa de neutralidad y  paz armada e intercambios de territorios con Portugal en Brasil. Con Carlos III (1759-1788)
volvemos a las guerras participando contra Inglaterra en la Guerra de los 7 Años previa firma del Tercer Pacto de Familia en 1761 y en defensa de nuestras colonias del Caribe. Por la Paz de París (1763) recibíamos Luisiana y recuperábamos Manila y La Habana. En 1777 y 1778 firmábamos dos tratados con Portugal por el que conseguíamos territorios en Golfo de Guinea y Sacramento a cambio de Santa Catalina y Río Grande para Brasil. Intervenimos en la Guerra Independencia de las 13 Colonias contra Inglaterra (1776-1783) de la que conseguimos recuperar Menorca, Honduras y Dos Floridas a cambio de entregar a Inglaterra Bahamas y Providencia. Con Carlos IV y el estallido de la revolución francesa se rompieron alianzas con Francia hasta que en 1797 volvimos a colaborar con ellos.


10.6.- La España del Siglo XVIII: la política borbónica en América

Se centró en sacar dinero de ellas para salvar el déficit de Hacienda, hacer que América trabajara para España y reafirmar su dominio sobre ella.  Así, se crearon Juntas de Comercio y Consulados de Comerciantes en cada virreinato, se crearon compañías por acciones  con permiso de la Corona. A cambio de reducir el monopolio, la Corona recibía más ingresos fiscales y frenaría el contrabando. Se pusieron en marcha decretos de libertad de comercio en 1765 y 1778 acabando el monopolio de Cádiz. La llegada de algodón permitíó el inicio de la industria textil algodonera en Cataluña. En 1750 se compró a Inglaterra el asiento de negros pero sin tanto éxito económico. Para frenar el contrabando se creó una flota de vigilancia por el Caribe. La participación en la Guerra de los 7 Años e Independencia de las Trece Colonias conjugaba la defensa de las colonias y la ampliación territorial. Se creó un ejército con población criolla y mestizos, llegaron las medidas ilustradas y la expulsión de los jesuitas (1767) dejó desamparados a los indígenas. Se mantuvo la división administrativa y las instituciones de época de los Austrias pero se crearon dos virreinatos más (Nueva Granada y La Plata) y se exportó la figura del intendente. Malestar criollo por no tener acceso a cargos políticos pese a su dinero y formación e inicio de la primera rebeldía contra la autoridad del rey en Cuzco con Tupac Amaru (1780).

10.7.- La Ilustración en España

Este movimiento intelectual defendía los derechos innatos del individuo y un conjunto de libertades que le permitirían su desarrollo y el de la sociedad en la que vivían. La Razón debía guiar al hombre y a los pueblos. El momento álgido en España se produjo en el reinado de Carlos III con Campomanes, Jovellanos, Cabarrús, el Conde de Aranda. Las medidas ilustradas buscaban liberalizar el comercio americano, lograr el desarrollo agrario, crear manufacturas reales para potenciar la inversión y acabar con limitaciones del estamento privilegiado, abrir al Universidad frente a la intromisión de la Iglesia, creación de Academias privadas con apoyo del Estado, las Reales Sociedades Económicas de Amigos del País para encontrar soluciones a los problemas patrios. Se hicieron amplios estudios de Botánica (Celestino Mutis), Física y Química aplicada a la siderurgia. En literatura, los textos moralizantes (Samaniego) y la crítica social de Moratín, el desarrollo del periodismo y la prensa diaria permitieron la divulgación de ideas y la crítica social y política del momento.

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