12.2. El sexenio democrático (1868-1874): intentos democratizadores. La revolución

12.2. El Sexenio democrático (1868-1874): Intentos democratizadores. La revolución, el reinado de Amadeo I y la Primera República
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Tras la firma del Pacto de Ostende entre progresistas y demócratas, en 1868 la Uníón Liberal (ahora liderada por el general
Serrano, ya que ODonnell había muerto un año antes) decide unirse al pacto. La situación política previa al golpe se caracterizaba por la corrupción, la impopularidad de la reina, el descrédito de los moderados, y la crisis económica causada en gran parte por el elevado déficit del Estado. El único apoyo que tenía Isabel II a comienzos de 1868 era Narváez, pero éste muere en la primavera del mismo año.La sublevación contra la reina, dirigida por el almirante Topete (a quien apoyan Prim y Serrano) va a iniciarse en Septiembre de 1868 en Cádiz. El golpe contó rápidamente con simpatizantes en todo el país. Las escasas tropas fieles a la reina fueron derrotadas en Alcolea (Córdoba). Isabel, que se encontraba en San Sebastián, decidíó exiliarse en Francia. El triunfo de la Revolución Gloriosa va dar comienzo a un periodo en la historia de España denominado el Sexenio
Democrático (1868-1874), caracterizado por la inestabilidad política.Nada más iniciarse el periodo, se decidíó nombrar un primer gobierno provisional, presidido por Serrano, en el que se incluían varios progresistas (Prim, Zorrilla y Sagasta entre ellos). El nuevo gobierno decidíó convocar elecciones a Cortes por sufragio universal masculino. Esas Cortes decidirían cuál sería la forma de gobierno de España a partir de entonces.Las Cortes redactaron una nueva constitución, la de 1869, que (aparte de reconocer la soberanía nacional) introducía por primera vez en España el sufragio universal masculino para los mayores de 25 años. Además, se respetaba la libertad de cultos, y por primera vez se reconocía el derecho de reuníón y de asociación. Asimismo, la constitución establecíó que España sería una monarquía democrática. A tal fin, se decidíó nombrar regente al mismo general Serrano, siendo presidente del gobierno Prim, político que tendría como misión principal la búsqueda de un nuevo monarca para el trono de España.El candidato elegido fue Amadeo de Saboyá, hijo de Víctor Manuel II de Italia. Sin embargo, cuando Amadeo I llega a España, recibe la noticia de que su principal valedor (Prim) había sido asesinado en Madrid. Su ausencia debilitó al nuevo monarca.El reinado de Amadeo I (1871-1873) se caracterizó por la inestabilidad política en el país. La alianza política entre unionistas, progresistas y demócratas comenzó a resquebrajarse. Algunos moderados, como Cánovas, negaron legitimidad al nuevo rey. Dentro del partido progresista, aparecieron dos tendencias: el Partido Constitucionalista de Sagasta, y el Partido Radical de Zorrilla. Los carlistas aprovecharon la ocasión para resurgir, e iniciar nuevas sublevaciones reclamando el trono. Los republicanos exigían reformas más radicales. Las huelgas aumentaron en el país, debido a la crisis económica y el paro. En Cuba se había iniciado un levantamiento armado de carácter independentista. Además, las elecciones se falseaban constantemente. Impotente y desilusionado, Amadeo I decidíó abdicar. Las Cortes decidieron proclamar la Primera República Española en Febrero de 1873.A pesar de las buenas intenciones, la Primera República fracasó en breve tiempo. El republicanismo contaba con escaso apoyo popular, y la oposición de los sectores económicos más poderosos del país. Los republicanos eran casi todos intelectuales. La I República tuvo cuatro Presidentes: Figueras, Pi i Margall, Salmerón y Emilio Castelar. El nuevo régimen tuvo escaso reconocimiento internacional.Los gobiernos de la I República decidieron acometer reformas profundas: supresión del impuesto de consumos (que provocó el aumento de la deuda pública); supresión de las quintas y creación de un ejército formado por voluntarios (proyecto que fracasó); prohibición del trabajo a los menores de 10 años; abolición de la esclavitud en Puerto Rico; e intento de construir un Estado Federal (aunque este proyecto no llegó a ser aprobado).Los desafíos a la I República fueron numerosos:- la crisis económica era profunda, y fue la causa de que la movilización obrera fuera intensa. Las huelgas en las fábricas, y las ocupaciones de fincas por la fuerza en Andalucía, desestabilizaron al régimen.- los carlistas negaban legitimidad a la República, se sublevaron, y llegaron a establecer una regencia en Estella.- la guerra de emancipación en Cuba (iniciada en 1868 por los independentistas Gómez y Maceo) continuaba mermando las arcas del Estado, y provocando numerosas pérdidas humanas.- los alfonsinos (partidarios de que el hijo de Isabel II, Alfonso, asumiera el trono) comenzaron a conspirar contra el régimen.- los republicanos más radicales impulsaron la sublevación cantonalista. Los cantonalistas dirigían un movimiento anticapitalista que (ante el descrédito del gobierno de Madrid) deseaba crear pequeños estados regionales casi independientes en España. Fue un fenómeno que se dio sobre todo en Andalucía y en la regíón murciana: en Cartagena llegaron a acuñar moneda propia, y a redactar su propia constitución. El cantonalismo fue reprimido con dureza por el ejército.

En Enero de 1874, el general Pavía encabezó un golpe militar que derrocó a la I República. Los militares decidieron entregar el poder al general Serrano. Éste actuó dictatorialmente, y se propuso como objetivo principal mantener el orden público.En Diciembre de 1874, un Golpe de Estado dirigido por el general Martínez Campos en Sagunto (Valencia) puso fin al sexenio democrático. Alfonso XII fue proclamado rey, y dio comienzo el periodo de la Restauración borbónica.

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