La Oposición al sistema

Las Fuerzas que quedaron al margen del sistema eran los republicanos, desplazados y divididos tras el golpe de Pavía, los carlistas, derrotados en el campo de Batalla, y el naciente movimiento obrero. Todos estos grupos se opusieron con Escaso éxito hasta 1923 al régimen de la Restauración.

Los partidos republicanos, con base social En las clases medias urbanas, perdieron gran parte de su apoyo social dado que Los partidos obreros y nacionalistas comenzaron a resultar más atractivos como Fuerza de oposición al sistema. Cánovas los situó al margen de la legalidad en El inicio de la Restauración, de este modo sus más destacados dirigentes Tuvieron que marchar al exilio. Desde comienzos de la década de los ochenta Carecían de apoyos sociales que hicieran viable su opción, por lo que oscilaron Entre la vía revolucionaria (Ruiz Zorrilla) Y la vía electoral (Nícolás Salmerón), a la que volvieron tras la amnistía de Sagasta. Otros grupos Republicanos eran los federalistas De Pi i Margall y los posibilistas de Castelar (este último acabó aceptando la monarquía). A lo largo del período de La Restauración, los republicanos determinaron criterios comunes de actuación y Poco a poco fueron obteniendo el triunfo en las elecciones en las principales Ciudades.

Los Carlistas después de la derrota militar en 1876 también se vieron obligados al Exilio. A partir de entonces se mantuvieron divididos entre los que rechazaban El régimen, partidarios de una nueva Guerra Civil, liderados por Ramón Nocedal Y los que pedían la integración pacífica en el sistema político, liderados por Vázquez de Mella. Estos últimos formarían un partido y lucharían dentro de la Legalidad, aunque nunca consiguieron más del 3 % de los Escaños en las elecciones en las que se presentaron.

Los partidos obreros se organizaron Legalmente a partir de la promulgación de la Ley de Asociaciones en el gobierno largo de Sagasta. La división Obrera, a nivel mundial, tras la ruptura de la AIT (1872) también marcó la Evolución del obrerismo en España. El movimiento obrero estaba escindido en dos Grandes corrientes ideológicas, los socialistas marxistas y los anarquistas De Bakunin, representados en España durante el sexenio por el anarquista
Fanelli y el marxista
Lafargue.

En España, el anarquismo fue la Corriente mayoritaria: Sus principales focos estaban en el campo andaluz y en El proletariado urbano catalán. Los anarquistas rechazaban toda acción política Por vía parlamentaria, entre sus filas ganó adeptos la táctica propuesta por Kropotkin, partidario de la “propaganda por el hecho” (“Mano Negra”, que Practicaba la violencia terrorista). En esa dinámica se enmarca el asesinato de Cánovas del Castillo. Desde el año 1887, tras la ley de Asociaciones del Gobierno Sagasta, realizaron una intensa actividad organizativa y de lucha Social. En 1881 nacíó la Federación de Trabajadores de la Regíón Española, cuyo principal líder fue Anselmo Lorenzo. En 1910 nacíó la CNT, con Una ideología colectivista, libertaria, apolítica, anticlerical y Revolucionaria.

Dentro Del marxismo el PSOE se convirtió en el partido más importante. Fue fundado, en la Clandestinidad, en 1879 por Pablo Iglesias.
Su aspiración inicial Era el fin de la sociedad capitalista, la abolición de las clases sociales y la Toma del poder político por la clase trabajadora (ideología antiburguesa y Anticlerical). En 1888, el propio Pablo Iglesias fundó la Uníón General de Trabajadores (UGT)
como sindicato del partido. Sus reivindicaciones se Centraron en mejorar las condiciones de trabajo: Establecer un salario mínimo; Reducción de la jornada laboral; descanso dominical; prohibición del trabajo Infantil, etc. En cualquier caso, tanto el PSOE como la UGT fueron hasta Comienzos del Siglo XX grupos minoritarios, en comparación con los anarquistas. En 1910
Pablo Iglesias consiguió por primera vez para el socialismo el acta De diputado.

También Es interesante señalar la aparición de una “oposición Intelectual” basada en la doctrina filosófica conocida como Krausismo. En 1876, Francisco Giner de los Ríos Fundó la Institución Libre de Enseñanza revitalizando El mundo cultural español y negándose a ajustar sus enseñanzas a los dogmas Oficiales de la época.

Regionalismo Y nacionalismo

Otra Línea de oposición al sistema político fue la aparición de los movimientos nacionalistas periféricos Que se manifestaron en la última década del XIX. Partían de la conciencia de Las diferencias culturales que le alejaban de la política unitaria propia del Estado liberal.

En Cataluña existía una intensa conciencia Nacional que se tradujo en iniciativas sociales en asociaciones y periódicos. Este movimiento cultural, literario y apolítico, que trataba de recuperar la Lengua y la cultura catalana, es conocido como Renaixença.
El primer gran impulsor del catalanismo fue Valenti  Almirall, fundador del Diari  Català (primer periódico en catalán) y creador Del Centre Catalá, que apostaba por Un catalanismo (republicano federal) interclasista que defendiera las señas de Identidad catalanas, reivindicando la autonomía y denunciando el caciquismo. En 1891 se formó un primer grupo Político Uníó Catalanista, liderado Por Enric Prat de la Riba, que Redactaría las Bases de Manresa, Primer documento reivindicativo del catalanismo, que reclamaba el autogobierno Y una división de competencias entre el Estado español y la autonomía catalana (poder político para Cataluña dentro del Estado español).  Más adelante (1901) este movimiento se Escindiría en dos grandes líneas una conservadora, defensora de los intereses Económicos proteccionistas de los industriales catalanes, cuyo partido más Representativo fue la Lliga Regionalista (Prat de la Riba), y otra republicana y revolucionaria, representada por Ezquerra Republicana (Lluis Companys).

En el País Vasco los planteamientos Nacionalistas, en defensa de los fueros vascos, encontrarían su cauce con la Fundación, en 1895, del Partido Nacionalista Vasco (PNV)
por Sabino Arana, un antiguo integrista Católico carlista, que hizo una propuesta independentista basada en la Exaltación de la raza, la religión católica, euskaldunización de la sociedad Vasca y rechazo de la influencia cultural española (maketos). Al principio su Apoyo social fue escaso debido a su radicalismo antiespañol, a su rancio Tradicionalismo agrario y a su limitación al entorno vizcaíno. Pero, desde Comienzos del XX, evoluciónó hacia posturas más moderadas que extendieron su Influencia entre la población vasca.

En Galicia, de modo semejante a lo Ocurrido en Cataluña, surgíó un movimiento cultural         O Rexurdimiento, que trataba de recuperar las tradiciones gallegas y que poco A poco incorporó planteamientos políticos descentralizadores que reclamaba Determinadas competencias (Alfredo Brañas).
En 1889 Manuel Murguía (esposo de Rosalía de Castro) fundó la Asociación Regionalista
Galega, de marcada tendencia tradicional y menor implantación Política que los otros nacionalismos. Con ella el galleguismo político inició Su andadura.

Movimientos De carácter regionalista surgieron en otras zonas de España como Andalucía (Blas Infante) o Valencia (Constanti Lombart y Teodor Llorente), pero su Trascendencia política fue menor.